En lugar, muy pero muy cercano se libra una gran batalla entre dos grupos criminales. Los mensajes de dicho enfrentamiento se asemejan a una partida de ajedrez, en la que los competidores son quienes controlan la delincuencia organizada. Los peones, alfiles, torres, caballos, hasta llegar al rey, parecen ser empleados de los ajedrecistas.
Recordemos que el pasado 6 de junio de 2020 el gobernador de Jalisco reconoció públicamente que la delincuencia organizada estaba infiltrada en la fiscalía de Jalisco. Así justificó que la actuación de agentes de la Policía Investigadora que realizaron detenciones arbitrarias de jóvenes manifestantes podría deberse a una infiltración de la delincuencia organizada en la institución.
El día de la manifestación se llevaron a cabo decenas de levantones de estudiantes y se configuró el delito de: desaparición forzada.
En ese fecha se violaron derechos humanos y los jaliscienses recordamos la arbitrariedad y la prepotencia con que se actuó en contra de los globalifóbicos en mayo de 2004, durante la Cumbre de lideres de América Latina, y por lo cual, por cierto, no hubo castigo para los autores, al contrario.
El gobernador culpó a la delincuencia organizada de estas detenciones arbitrarias.
Y la pregunta es ¿que interés tendría la delincuencia organizada en detener arbitrariamente a estudiantes que se manifestaban contra actos de prepotencia de las autoridades jaliscienses?
Desde mi perspectiva no tiene lógica alguna el intento de justificación por parte del Ejecutivo.
Más bien los mismos que detuvieron y torturaron a los globalifóbicos, repitieron sus acciones contra los estudiantes manifestantes por defender la causa Giovanni, quien fue asesinado por elementos de la policía de Ixtlahuacan de los Membrillos.
Hace unos días se dio a conocer el mensaje de una manta colocada en la Preparatoria 2 de la Universidad de Guadalajara, misma que virtió serias amenazas en contra de personal de la policía. Dicha mensaje fue firmado por el cartel de Sinaloa, señalando acuerdos entre ellos.
Días después hubo reacción al respecto y fue en el municipio de Tonalá (se dice que en la plaza principal) en el que se colgó otra manta (aparentemente) firmada por el Cartel Jalisco. En esta manta se recriminó a personal de la Fiscalía del Estado el no haber cumplido con pactos y se mencionó la entrega de dinero a personal de la citada corporación.
Por lo anterior, parece ser que la delincuencia organizada pacta y controla instituciones de Jalisco, unos presumen del control sobre policías municipales, otros hablan del control de la Fiscalía estatal.
Mientras esto sucede, la Guardia Nacional deambula por las calles de Jalisco aparentemente sin inteligencia y sin objetivos específicos.
Recientemente se dieron a conocer acciones innovadoras de la delincuencia organizada, en la que ofrecen trabajo en las redes sociales, y al momento en el que se apersonan los interesados al lugar del encuentro, resultan ser secuestrados y extorsionados a través de los celulares, contactando a sus familiares.
Lo anterior aleja al turismo nacional e internacional.
Lo anterior se debe al robustecimiento de la delincuencia organizada, a los altos índices de impunidad en Jalisco y a una creciente cifra negra, en la que los ciudadano víctimas de la comisión de un delito prefiere no denunciar, por desconfianza de la autoridad, por que no va a pasar nada o por temor a una venganza de los delincuentes, de la autoridad o de ambos.