Por Alberto Osorio Méndez
31 de diciembre 2021.- Último día de 2021, San Pedro Tlaquepaque –al menos por unas horas- se convierte en el santuario de los emecistas de todo Jalisco. Como pocas veces desde hace semanas, al gobernador Enrique Alfaro se le ve feliz, eso pasa luego de pleitos y diferencias con reporteros y medios de comunicación, por su trato rudo a la prensa.
El funcionario abre espacio en su agenda para asistir a la toma de protesta del nuevo cabildo y de la tercera administración encabezada por una mujer en la villa alfarera, se trata de Citlalli Amaya, quien paradójicamente asiste en menos de 4 meses a su segunda toma de protesta.
La anterior ocurrió a finales de septiembre, momentos antes de que el Tribunal Electoral declara nula la elección del 6 de junio por la intromisión del cardenal emérito Juan Sandoval en asuntos electorales y que llevó a repetir la elección el 21 de noviembre pasado.
En su mensaje, Citlalli Amaya aprovecha para solicitar al gobernador Enrique Alfaro ayuda en favor de Tlaquepaque. También agradece el apoyo de su antecesora la ex alcaldesa, María Elena Limón, ahora diputada federal por la vía plurinominal.
Ofrece a sus adversarios llevar cabo un gobierno de colaboración y de unidad, el mensaje va dedicado principalmente a los regidores de Morena, grupo encabezado por el ex candidato a la alcaldía, Alberto Maldonado, quien no dejó de impugnar hasta el último momento el proceso electoral.
Al final de su discurso, la nueva alcaldesa va y se despide de cada uno de los funcionarios de la administración saliente y luego cruza el estrado y saluda a los integrantes del nuevo cabildo. La emecista Citlalli Amaya tiende la mano al morenista Alberto Maldonado, pero no se registra ningún abrazo, sólo hay intercambio de palabras.
Alfaro aprovecha para tomarse fotos, y también un respiro luego de la serie de críticas que ha tenido últimamente.
En Tlaquepaque habla de la puesta en circulación del Mi Macro Periférico, una obra que a su juicio será la más importante de América Latina en 2021 y que operará a finales de enero de 2022; habla del próximo arranque de la obra de la Línea 4 del Tren Ligero que conectará a Guadalajara y Tlajomulco y anuncia el proyecto del Campus Tlaquepaque por parte de la Universidad de Guadalajara (UdeG), al tiempo que aclara que espera el apoyo de la casa de estudios, institución con la que también se abrió un frente de batalla.
Hoy ningún tribunal le dice que no a la señora Amaya. Citlalli desde el estrado y en medio de su discurso lanza un beso a sus padres y los asistentes le responden con un estruendoso aplauso que se escucha en “El Refugio” de San Pedro Tlaquepaque.
La nueva alcaldesa también agradece el acompañamiento que le brinda su esposo en lo que va su carrera política.
Termina el acto protocolario y en el cielo, el estallido de decenas de cohetes, marcan el inicio de una gestión municipal donde no se sabe si prevalecerá la forma de gobernar de la señora María Elena Limón o de Citlalli Amaya.
Muchos se preguntan si ¿será una nueva época en el desarrollo de ese municipio o María Elena Limón será el poder tras el trono?
