Sábado 11 de marzo de 2023.- Este sábado inicia en la zona indígena de Telcruz y San Miguel, del municipio de Cuautitlán de García Barragán, Jalisco, la primera fase del proyecto de biblioteca itinerante denominado Biblioburros Manantlán, con el que se atenderá a decenas de integrantes de la comunidad Nahua, de diferentes edades en un proceso de acercamiento y gestión de la lectura y que tiene como referente la obra de El Llano en Llamas del autor mexicano Juan Rulfo, un texto que, a decir del hijo de ese escritor, Juan Carlos Rulfo, en el año de 2023 la publicación cumple 70 años de existencia.
También se busca el acercamiento a la lectura de varios de los cuentos del Nobel de literatura de Colombia, Gabriel García Márquez y de otros textos infantiles.
Con el apoyo del Sistema de Educación Media Superior (SEMS) de la UdeG, y de acuerdo a los detalles que se ofrecieron en la rueda de prensa ofrecida por la representación del Coloquio Internacional de Periodistas y Escritores durante la reciente edición de la Feria Internacional del Libro (FIL), se lleva a cabo este primer programa en su tipo en México, y que en Colombia fue reconocido por la UNESCO.
La iniciativa surge de los acuerdos de mayo de 2022, tomados durante la celebración de VI Coloquio Internacional de Periodistas y Escritores de San Gabriel, Jalisco, con el apoyo de CAJAMAG, de Colombia y de la Red de Cronistas Rurales de México, organismos que operan sin fines de lucro y que trabajan en la difusión de la obra de Juan Rulfo y García Márquez.
El proyecto de Biblioburros, surgió desde hace varios años en Colombia y fue reconocido a finales del 2022 por la UNESCO, como uno de los programas más éxitos en su contribución para estimular el hábito de la lectura entre habitantes de las comunidades indígenas de la Sierra Nevada de ese país.
Hoy se pone en práctica en México, en 2023. Se trata de una propuesta en donde los gestores de la iniciativa llegan con decenas de libros que son cargados y distribuidos en lomo de burros con el fin de poder arribar a comunidades marcadas por caminos de difícil acceso, de ahí el nombre de Biblioburros.
Posteriormente el encargado de la gestión de la lectura, a quien denominamos biblioburrero, se encarga de dar o prestar a los interesados en participar en esa aventura, los textos que sirven para el cumplimiento del objetivo.
Leer o escuchar la voz de los biblioburreros y de los pobladores de la comunidad nahua es ejercer la comunicación sustentada en el principio de la oralidad, en una acción que sirve para fortalecer la identidad de la población a la que se atiende, según indicó la escritora y maestra colombiana Addy Martínez de Llano, la responsable del taller de capacitación de Biblioburros Manantlán.
En la primera fase de desarrollo de la iniciativa se cuenta con una fuerza de arrastre de cinco burros, y al menos 6 biblioburreros, que atenderán a ocho localidades de Manantlán en un periodo de tiempo de 8 meses.