Por: Raúl de la Cruz
Viernes 12 de abril de 2024.- Dicen los mediocres que las “comparaciones son odiosas” sin embargo, las comparaciones son necesarias porque establecen diferencias. Lo anterior a cuento porque resulta necesario e imprescindible definir la gran diferencia que existe entre la Champions League que se juega en Europa y el mediocre Torneo de Campeones que organiza la Concacaf.
El torneo de Campeones es una pésima copia que deja bastante que desear. Es más, ni la quieren jugar los equipos del área. En la actualidad, el único atractivo es la presencia del Inter de Miami con la presencia de Lio Messi, que, por cierto, llenó el estadio de Monterrey el pasado 10 de abril.
Por no creo que los aficionados estén al pendiente de los siguientes partidos: Tigres vs Columbus Crew; Pachuca vs El Herediano; América vs News England. Los consumen, una minoría, porque les sirve de botana, pero viéndolos detenidamente su accionar es muy mediocre.
Contrariamente la Liga de Campeones de la EUFA (Champions League), es sin lugar a dudas, el mejor torneo del universo. Incluso, mejor que la Copa Mundial que se juega cada cuatro años. Por una razón, compiten los menor jugadores del universo y los duelos suelen ser bastante emotivos sin escatimar esfuerzo alguno.
Por ejemplo, el Real Madrid y el Manchester City nos ofrecieron un extraordinario partido el martes de esta semana con un empate a tres goles por bando. Y goles dignos de una obra de arte. Iniciando desde el minuto dos con un soberbio disparo de tiro de castigo de Bernardo para poner en ventaja a los “ciudadanos”.
Luego vendría el Francés del Madrid con otro estupendo tanto para poner los cartones en igualdad de condiciones. Y, por si fuera poco, el brasileño Rodrigo toma el balón desde el medio campo, hace un veloz recorrido por la banda izquierda, se planta frente al arquero y anota el gol de la ventaja para los merengues.
Para esos instantes la presión estaba en sus máximos niveles. Prácticamente iniciando el segundo lapso. Rodri, le entrega un balón a Bernardo quien hace un amague, se lo pasa a Stone quien de inmediato entrega a Phil Foden, que ni tardo ni perezoso, suelta un disparo que se incrusta en el ángulo superior derecho del portero del Madrid para el empate a dos tantos.
Empero las emociones no terminarían ahí, enseguida vino un tanto de pintura de Guardiol para el City para remontar el marcador. Prácticamente en las postrimerías del encuentro Vinicius manda un medio centro que el uruguayo Valverde la toma de aire para anotar un imperial tanto que iguala el encuentro. El partido termina con un fabuloso tres a tres por bando.
Solamente para ratificar lo anterior, el pasado miércoles observé el partido entre Pachuca y el equipo de Costa Rica el Herediano. Gradas desoladas, ritmo de juego semilento, jugadores prácticamente desconocidos en el ámbito internacional y a los 20 minutos comencé a bostezar.
Repito, mientras que en la Champions participan jugadores de la talla de Vinicius, Luca Modric, Phil Moden, Rodrigo, Robert Lewandowski, João Cancelo, Lamine Yamal, Thibaut Courtois, Killian Mbape, Militao, Tony Cros, etc.
