Independiente del negocio de gūachicol encontrado en el Peribús, del que nada se ha vuelto a saber, se ignora, además, el destino de las ganancias que reciben los concesionarios, dado que el mantenimiento -300 millones de pesos de enero de 2023 a mayo pasado-, los absorbió el erario público, vía Tren Eléctrico (EL DIARIO NTR/1-07-24). La sospecha es si las enormes utilidades y las millonadas del tostón que se clavan los camioneros, se reparten entre gobernantes.