En medio de un discurso donde da la impresión que el gobernador Alfaro no reconoce ningún mérito a la UdeG y el rector Ricardo Villanueva se defiende, será esta semana la prueba de fuego para ambos, cuando supuestamente se reunirían de nuevo. Además de que existe la duda sobre si Alfaro acudirá o no al informe de Villanueva el próximo miércoles. ¿Será prudente que acuda en medio de mensajes cifrados? ¿La comunidad universitaria recibiría bien a quien tanto criticó a su líder recién fallecido? ¿Será meterse a la boca del león? O ¿en verdad la universidad ya es como la quiere ver Alfaro?