Muchos días han pasado desde que un jerarca católico habló de llevar a cabo un censo real sobre los desaparecidos en Jalisco. Ahora con cerca de 16 mil víctimas, decenas de madres llenaron sus corazones de esperanza cuando -el domingo- vieron a la Virgen de Zapopan bajar de los altares y posarse junto a ellas en la Glorieta de los Niños Héroes, llamada ya de los Desaparecidos, para tratar de acompañarlas en su tremendo dolor, ante el desamparo de la justicia.