Álvaro Leyva, excanciller de Colombia, sostuvo reuniones en abril en Estados Unidos con asesores cercanos al expresidente Donald Trump para solicitar respaldo a un plan que implicaría la salida del poder de Gustavo Petro. Las gestiones, de las que dan cuenta audios obtenidos por El País y fuentes cercanas a congresistas republicanos, incluían la intención de involucrar a actores armados y empresariales bajo un “gran acuerdo nacional”.
Leyva, quien formó parte del gabinete de Petro hasta finales de 2024, buscó acercarse al senador Marco Rubio y sostuvo encuentros con figuras del Partido Republicano, entre ellas el congresista Mario Díaz-Balart. Según las grabaciones, su propósito era ejercer una presión internacional que derivara en la salida del presidente. La Casa Blanca, de acuerdo con las mismas fuentes, no consideró la propuesta.
“Nos dijo que tenía todas las herramientas para ejecutar un plan y sacarlo. Su lugar lo ocuparía Francia Márquez. Contaba con evidencias de que Petro no podía seguir ejerciendo el cargo”, relató una de las personas que estuvo presente en las reuniones.
En los audios, Leyva hace referencia a diversos sectores que debían involucrarse en el plan, como el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el Clan del Golfo y gremios empresariales. Asegura haber tenido comunicación con ellos y manifiesta preocupación por el orden público. “Ese tipo presidiendo las elecciones de 2026… es que, además, el orden público se desbordó. Eso no puede suceder, sino con un gran acuerdo nacional”, afirma en una de las grabaciones.
El excanciller también difundió cartas en redes sociales en las que acusaba al presidente Petro de presuntos problemas de adicción y atribuía a su asesora Laura Sarabia la responsabilidad de facilitar el consumo de sustancias, lo cual ha sido negado por los señalados.
Durante sus conversaciones grabadas, Leyva mencionó posibles interlocutores y figuras políticas para articular el movimiento, entre ellos la experiodista y aspirante presidencial Vicky Dávila, así como Miguel Uribe, precandidato del Centro Democrático, partido del expresidente Álvaro Uribe. “Hay que meter malos y buenos, pero con representación”, se le escucha decir.
Las grabaciones llegaron a manos del servicio secreto colombiano y fueron escuchadas por el presidente Petro en su despacho. Tras conocer el contenido, el mandatario acusó públicamente a Leyva de intentar perpetrar un golpe de Estado, aunque no ofreció detalles. Leyva viajó a Madrid alegando motivos de seguridad.
El excanciller también manifestó interés en que la vicepresidenta Francia Márquez asumiera la presidencia. En las grabaciones se refirió a un episodio público en el que Márquez confrontó al presidente durante un Consejo de Ministros transmitido en vivo. También se dieron a conocer mensajes intercambiados entre ambos, en los que Leyva la alentaba a “seguir firme” en su rol.
Petro, al escuchar los audios, solicitó explicaciones a Márquez, quien negó haber actuado a espaldas del presidente. Afirmó no haber participado en ninguna estrategia para removerlo del cargo. Según fuentes cercanas, el mandatario le pidió un desmentido público que ella rechazó, lo que deterioró aún más la relación entre ambos.
Leyva fue una figura clave al inicio del mandato de Petro. El presidente le confió tareas como el restablecimiento de relaciones diplomáticas con Venezuela y el avance de la política de “paz total” con los grupos armados. Su salida del gabinete ocurrió en noviembre de 2024, cuando fue inhabilitado por la Procuraduría tras anular de manera irregular una licitación de pasaportes.