Carta del lector
Sobre el artículo referente al espiritualismo indio:
Muy interesante e ilustrativo este texto sobre el pensamiento hindú o indio. Es el paradigma de una civilización. Pero también sus estigmas como la aceptación de las castas y, con ello, la dominación material irreductible del poder sobre la sociedad desvalida.
Armando Martínez Moya
Comentario al interesante artículo sobre La Belleza:
Un agradecimiento al autor por introducir a este espacio las categorías estéticas.
Como comentario, se podría apuntar que ciertamente la belleza se entiende como proporción desde la Grecia antigua. Es una noción que se conecta con las relaciones matemáticas y que ya fue teorizada por la escuela pitagórica. Por ejemplo, en el campo de la música.
Sin embargo, a esa concepción “objetivista” habría que sumarle la “subjetivista”, que aborda la belleza no como una característica de los objetos sino como una reacción en el sujeto. La belleza entonces tendría que ver con algo placentero.
Ahora bien, ese placer de la belleza ya desde la Antigüedad se contrastó con otro tipo de placer, quizá más intenso. El texto más famoso es “Sobre lo sublime”, atribuido a Longino
Ya en la Modernidad, Edmund Burke identificó en lo sublime un toque de terror. Y Kant en sus “Observaciones sobre el sentimiento de lo bello y lo sublime”, primero, y en la “Crítica del Juicio”, después, llegó a distinguir tipos de sublime, como el sublime matemático, lo de gran tamaño, y lo sublime dinámico, de gran potencia.
Lo bello, entonces, sería proporcionado y provocaría un placer tranquilo. Mientras que lo sublime sería más bien aquello que sale de proporción y provoca también un placer, pero mezclado con miedo, horror, terror.
“Lo sublime del equilibrio” que menciona el autor en su texto, desde esta óptica, casi podría ser un oxímoron. Igual, podría cuestionarse su conclusión, en la que afirma que el máximo gozo estético estaría en la belleza. Como lo sublime, según varios autores, como el Pseudo Longino, lleva al éxtasis (algo que lo bello no puede alcanzar), podría decirse que es aquél y no éste el que estaría más cerca de ese máximo gozo.
Saludos
Pseudo Longino
Comentario al artículo sobre Padilla:
¡Así es Gabrielito! Ese desdichado, en su afán de gloria mal entendida, llevó a la universidad a un callejón sin salida. Actualmente, estudiar un posgrado en la UdeG sale igual de caro que en una universidad particular. Esta sólo se ha quedado con el mote de gratuita. A cada plantel de Colegio de Bachilleres le ha puesto un plantel a un lado, endosado al presupuesto estatal y poniendo en competencia al estado consigo mismo. En una actitud lángara, en la que sólo pierde la sociedad.
Lejos de coordinarse la universidad con otras instituciones, las quiere desaparecer, celosa de ser la única hija, queriendo abarcar absolutamente todo. Pero con todos los vicios habidos y por haber. En ese juego perverso, muchos profesores de Bachilleres han sido despedidos por querer, el administrador estatal, dar gusto a esos insaciables bichos. Mismos a los que cualesquier cantidad de dinero no les será suficiente. Su ambición, va más allá de sus capacidades y habilidades. ¡Pues la única producción en ciencia y tecnología, si es que la hay, se ve opacada por la voracidad de esas huestes nefastas!
Alfonszo Rubio Delgado
