Ciudad de México.- Salvador Cienfuegos Zepeda, exsecretario de la Defensa Nacional que tras ser capturado en Estados Unidos fue devuelto a la Fiscalía General de la República, en México, donde se le dejó ir en libertad ─sólo con una advertencia de que estaba siendo investigado─, tenía encima más pruebas que lo colocaban como narcotraficante que el mismo Genaro García Luna, quien se desempeñó como secretario de Seguridad Pública en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa.

Lo anterior según Mike Vigil, exjefe de Operaciones Internacionales de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés).

Entrevistado por Álvaro Delgado Gómez y Alejandro Páez Varela, para el programa Los Periodistas, Vigil afirmó que los cargos contra de Cienfuegos Zepeda muestran cómo por un funcionario corrupto puede perjudicar el accionar de la justicia en Estados Unidos y México. Además, lamentó que autoridades mexicanas filtren ─como en el supuesto caso del general en retiro─ información sensible a grupos del narcotráfico.

A decir de Vigil, la evidencia en contra del mando militar era fuerte y concisa, toda vez que los fiscales federales de Estados Unidos van revisando los caso y, de haber alguno inconsistencia, no se permite que avancen las consignas.

“Los fiscales en Estados Unidos no acusan si la evidencia no es sólida”, insistió, Mike Vigil, quien es uno de los agentes más condecorados de la DEA.

–¿Qué pasa si en México si no se juzga al General Cienfuegos? –, preguntó Delgado.

Lo primero, dijo Vigil, es que México dará la imagen de que no le interesa la justicia y que sigue la impunidad, porque hay pruebas suficientes para comprobar que el extitular de la Sedena no sólo permitía la protección de un grupo criminal en México, sino que sabía del trasiego de droga a Estados Unidos y Sudamérica.

El caso de Genaro García Luna es mucho más débil que el del General Cienfuegos, enfatizó Vigil, ya que, recordó la evidencia en contra del militar tiene miles de intercepciones de mensajes de su Blackberry que lo ligan con delincuentes.

Finalmente, consideró que la liberación de Cienfuegos en Estados Unidos y su posterior entrega a México obedece a la presión que las Fuerzas Armadas ejercieron sobre Andrés Manuel López Obrador, presidente de México.

“Es un grupo amplio de militares que conocen muy bien a Cienfuegos y que probablemente fue él quien le dio el ascenso. Tiene muchos amigos e incluso admiradores dentro del Ejército”, puntualizó Vigil.