Raúl de la Cruz
Viernes 03 de marzo de 2023.- Cuando se suponía que Diego Martín Cocca presentaría una convocatoria con vistas a una renovación absoluta, salió con los mismo para enfrentar a dos “poderosísimas” selecciones: Surinam y Jamaica.
Convocó a 34 jugadores de los cuales ¡20! Fracasaron en el pasado mundial de Qatar. Todos los demás de una u otra manera habían sido convocados por el anterior director técnico que no les dio para llegar a la justa mundialista.
Dirían los “especialistas” que debe haber una combinación de experimentados con jóvenes. Sin embargo, la selección nacional no está para experimentos. En los países desarrollados se convoca a quienes se encuentran en su mejor momento no importa la edad o la experiencia.
Ahora bien, para iniciar un proceso mundialista hay que tomar en consideración: el momento y el futuro. Por ejemplo: Guillermo Ochoa, es convocado con ¡17 goles! Recibidos en siete partidos. Según las estadísticas de la FIFA es el arquero más goleado de todos los tiempos en el futbol europeo. En la actualidad tiene 37 años de edad, para el próximo mundial tendría 41.
¿Con ese arquero inicias un proceso? ¡Absurdo! Mismo caso podríamos decir del central Héctor Moreno y del delantero Raúl Jiménez quien desde que fue lesionado de la cabeza no volvió a ser el mismo. Para qué convoca a Sebastián Córdova si cuando lo tuvo en los Tigres nunca lo tomó en cuenta. Por supuesto que cada convocatoria trae consigo una serie de controversias, simple y sencillamente porque se elige conforme a los compromisos establecidos y donde juegan un papel importante los representantes y promotores de los jugadores.
Pregunté a un amigo del medio cuántos de los convocados son representados por Cristián Bragarnik. No me quiso decir la cantidad exacta “pero son muchos”. Lógico, es el representante de Cocca.
Es inexplicable que no se encuentre el delantero de Chivas Pocho Guzmán, al portero Miguel “Guacho” Jiménez quienes pasan por un excelente momento. “Chicharito” Hernández quien fue marginado injustamente para Qatar. Los argumentos que esgrime Cocca son totalmente rebatibles. Decir que es “cuestión de gustos” no lo deja bien parado por el contrario se presta para la sospecha.
Lo que más indigna es la falta de rigor en los “especialistas” que se dedican al cien por ciento al periodismo futbolero. ¿o será que también son parte de los compromisos? Después del rotundo fracaso en Qatar, esos gritaron a los cuatro vientos que se requería una restructuración total, tanto que exigieron la renuncia de directivos. Sólo uno de ellos se fue.
Todos los demás continúan, incluso, Elías Ayud, ex directivos del futbol, declaró: “Acuérdate quiénes eran los que votaron en contra de una oferta de América Móvil y Telemundo de mucho mayor cantidad de dinero y acuérdate quiénes estaban en ese comité y era justo Ares de Parga y otro era Irarragorri quien acaba de poner al técnico de la Selección, digo hablando claros, para qué nos hacemos weyes”, expresó el empresario en un programa de Claro Sports.