Culmina conversatorio Re-conocer, vivir y disfrutar Guadalajara

El conversatorio contó con la participación del historiador José Guillermo Celis y el literato Gerardo Esparza Rivas, quienes ofrecieron a los asistentes un recorrido imaginario por algunos de los espacios nocturnos más emblemáticos de Guadalajara. A lo largo de la charla, se recordó a las cantinas y centros nocturnos que, en muchos casos, han desaparecido y ahora solo existen en la memoria colectiva como vestigios de una época marcada por la melancolía. Estos lugares no solo fueron sitios de recreación, sino también escenarios de debates políticos, encuentros solidarios y la creación de proyectos literarios que han dado origen a mitos y leyendas urbanas.

Durante el diálogo, los ponentes subrayaron la transformación de estos espacios, adaptados a las nuevas formas de entretenimiento que responden a las necesidades de distintas generaciones y a la expansión geográfica de la ciudad. En este sentido, mencionaron cómo la tradicional “cicatriz de asfalto”, representada por la calzada que históricamente ha dividido a Guadalajara, ha desplazado su influencia hacia Federalismo, alterando la dinámica de estos espacios nocturnos.

Además, Celis y Esparza destacaron que muchos de estos lugares emblemáticos enfrentan problemas relacionados con la corrupción, especialmente en lo que respecta a los permisos, inspecciones y vigilancia, factores que siguen perpetuando las diferencias entre el oriente y el poniente de la ciudad. Esta situación, según los expertos, refleja un mal endémico que afecta tanto a la cultura como a la vida nocturna de Guadalajara, estigmatizando y marginando a algunos de sus espacios más representativos.

El ciclo “Re-conocer, vivir y disfrutar Guadalajara” se centró en la importancia de preservar y comprender la historia de la ciudad a través de sus tradiciones y espacios culturales, resaltando cómo estos lugares de esparcimiento nocturno, más allá de su función recreativa, han sido fundamentales en la construcción de la identidad tapatía. Con este último conversatorio, se cerró un ciclo de actividades que buscó reconectar a la comunidad con sus raíces culturales, al tiempo que se reflexionó sobre los desafíos actuales que enfrenta la ciudad en su desarrollo y crecimiento.