Guadalajara, Jalisco.-Este 9 de diciembre se conmemoran cinco décadas desde que el tequila recibió el reconocimiento de Denominación de Origen, convirtiéndose en el primero de México en obtener esta distinción. Fue en 1974 cuando el Diario Oficial de la Federación publicó la declaratoria que ha sido clave para la protección y proyección de esta bebida tradicional mexicana, transformándola en un símbolo cultural y un producto estratégico en el mercado global.
El tequila, cuyas raíces se encuentran en Jalisco y algunos estados vecinos, se ha consolidado como un referente de la agroindustria mexicana. Según datos del Consejo Regulador del Tequila (CRT), la producción de esta bebida pasó de 53 millones de litros en 1974 a 599 millones en el último año, de los cuales 399 millones se exportaron a diversos mercados internacionales. Este crecimiento refleja la evolución de una industria que ha sabido adaptarse a los retos económicos y tecnológicos a lo largo de cinco décadas.
La Denominación de Origen Tequila, que actualmente está protegida en 57 países bajo figuras de propiedad intelectual, no solo ha permitido resguardar la autenticidad del producto, sino que ha sido un motor para su internacionalización. En las últimas décadas, la introducción de nuevas técnicas de producción y la diversificación del portafolio de productos han contribuido a posicionar al tequila como una de las bebidas espirituosas más reconocidas a nivel mundial.
El CRT ha jugado un papel crucial en este proceso, supervisando la cadena productiva y garantizando la calidad y origen del tequila. Este esfuerzo incluye la certificación de cada lote y la vigilancia de su distribución en mercados extranjeros, enfrentando desafíos como la falsificación y el uso indebido de la denominación.
La agroindustria tequilera, que integra a productores de agave, destiladores, envasadores y distribuidores, ha logrado mantener su unidad para sortear las dificultades del mercado. Este esfuerzo conjunto ha permitido no solo estabilidad, sino también crecimiento sostenido.
A lo largo de estos 50 años, el tequila se ha convertido en un elemento de conexión para los mexicanos, presente tanto en celebraciones como en momentos solemnes. En el marco de esta conmemoración, la industria mira hacia el futuro con el objetivo de fortalecer su presencia global y continuar siendo un referente de calidad e identidad nacional.
