Guadalajara, Jalisco.-A pesar de que en la segunda semana del anterior mes de abril se encontraron al menos 24 fosas clandestinas en el Estado de México, Jalisco, Nayarit, Sinaloa, Sonora y Veracruz, para Alfonso Durazo, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana del gobierno federal, no hay un aumento, sino que antes “no se buscaban”.

“El tema de la fosas y narcofosas se ha incrementado aparentemente, pero debido fundamentalmente a que anteriormente no se buscaban, no había un trabajo sistematizado, institucional, de seguimiento, y de búsqueda de los desaparecidos, y de atención de las denuncias”, aseveró.

Incluso recordó que las pasadas administraciones ocultaban información sobre la verdadera situación de inseguridad. Ejemplificó que el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, denunció que su antecesor, Aristóteles Sandoval entregaba mensualmente al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública datos de incidencia criminal falsos. “Y no es el único estado, también lo denunció en los mismos términos el gobernador de Chihuahua, e igualmente la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum”, señaló Alfonso Durazo.

Añadió que “nosotros pretendemos regularizar, sistematizar, institucionalizar, transparentar, esa información, así es que por dura que sea la información, por duros, por dolorosos que sean los datos los compartiremos invariablemente con toda transparencia con la opinión pública”.

En febrero pasado, en Tecomán, Colima se detectaron 49 fosas clandestinas donde estaban enterrados 69 cuerpos.

En el caso de Jalisco, tan solo el pasado fin de semana se detectaron 11 bolsas con restos humanos en un canal de aguas pluviales que se ubican en Tlajomulco de Zúñiga. El 14 de marzo pasado, a 150 metros de ese sitio, pero dentro del municipio de Ixtlahuacán de los Membrillos, se extrajeron 20 cuerpos.

A principio de mayo, se localizaron dos casas de seguridad, una la colonia El Campanario, en Zapopan, de donde fueron exhumados 30 cuerpos, mientras que de otra que se ubica en la calle Río Bravo y Bartolomé de las Casas, en la colonia Olímpica, en Guadalajara, se encontraron ocho cadáveres, pero los trabajos de extracción se complicaron debido a la presencia de vapores tóxicos.