Electo, Robert Francis Prevost, estadounidense y peruano, como nuevo papa

Ciudad del Vaticano.– El humo blanco que emergió este miércoles desde la chimenea de la Capilla Sixtina marcó el fin del Cónclave y el inicio de un nuevo capítulo para la Iglesia católica: ya hay sucesor en el trono de San Pedro.

El nuevo Papa es Robert Francis Prevost de 69 años, originario de Estados Unidos, quien fue elegido por los cardenales que se encontraban reunidos en periodo electivo desde ayer, tras el fallecimiento de Francisco.

Robert Francis Prevost, quien a partir de hoy asumirá el nombre de León XIV, se convierte así en el pontífice número 267 en la historia de la Iglesia católica. Su elección fue anunciada oficialmente desde el balcón central de la Basílica de San Pedro por el cardenal protodiácono con el tradicional “Habemus Papam”.

Aún se espera la primera homilía y el mensaje del nuevo pontífice, así como su agenda inmediata frente a los retos que enfrenta la Iglesia en el mundo contemporáneo, desde temas internos hasta los desafíos sociales y geopolíticos globales.

Prevost nació el 14 de septiembre de 1955 en Chicago, Estados Unidos (y también cuenta con la nacionalidad peruana) y asistió a un seminario menor de la Orden de San Agustín en San Luis como novicio antes de graduarse en Matemáticas, en Filadelfia.

La elección ocurre en un contexto marcado por situaciones relevantes del momento, como crisis, debates internos o transformaciones sociales, lo que pone al nuevo Papa frente a un pontificado con múltiples desafíos desde sus primeros días.

Prevost, de 69 años y originario de Chicago es el primer estadounidense y peruano en llegar a la cima de la Santa Sede. Prevost vivió en Perú durante años, al principio como misionero y después como arzobispo.

Prevost también fue elegido en dos ocasiones como prior general —máximo líder— de la orden agustina —la orden que fundó san Agustín en el siglo XII. Francisco claramente lo tuvo en la mira durante años y lo trasladó del liderazgo agustino de regreso a Perú en 2014 para desempeñarse como administrador y posteriormente como arzobispo de Chiclayo.

Permaneció en ese cargo y obtuvo la ciudadanía peruana en 2015, hasta que Francisco lo llevó a Roma para asumir la presidencia de la Pontificia Comisión para América Latina, en 2023. En ese cargo, habría mantenido contacto regular con la jerarquía católica en la parte del mundo que cuenta con el mayor número de católicos.

Desde su llegada a Roma, Prevost ha mantenido un perfil discreto.

La comunidad católica, que agrupa a más de mil millones de fieles en todo el mundo, se prepara ahora para iniciar una nueva etapa bajo el liderazgo espiritual de Leon XIV, mientras miles de personas se congregan en la Plaza de San Pedro para presenciar este momento histórico.