El MP de El Salto no atiende denuncia por la sustracción de un menor

Publicado el

El Salto, Jalisco.-María Fernanda Méndez Limón, de 22 años de edad, ha acudido en tres ocasiones a la agencia del Ministerio Público ubicada en la carretera a El Salto, cerca de la colonia La Azucena, y las tres veces ha salido de ahí con las manos vacías.

Ella intentaba interponer una demanda en contra de su expareja, de nombre César Antonio Nuño Velasco, de 39 años de edad, quien el 1 de julio pasado sustrajo al hijo que procrearon juntos, un pequeño de un año 10 meses, y le dicen “que por eso no me pueden dar número de carpeta”.

La más reciente visita al MP fue en 12 de agosto pasado y le dijeron que no podían atenderla porque el sistema se había caído.

La segunda ocasión que acudió fue el 2 de julio, un día después de la sustracción de su hijo. Acudió precisamente para interponer una demanda por ese hecho. “No podemos a hacer nada, porque es el padre y tiene derecho a verlo”, le dijo el agente del MP. “Pero yo nunca me he negado a que lo vea”, respondió ella.

María Fernanda y César Antonio vivieron juntos durante tres años, “y hace tres meses nos separamos, y durante un mes no me pasó dinero para el niño”.

–¿Usted vio cuando se llevó al niño?

–Sí. Él siempre venía a casa de mi mamá después de las 22:30 horas. Fui al día siguiente al Ministerio Público y me dijeron que no podían hacer nada que porque él tiene todo el derecho, porque es el papá. Yo le decía al agente que no me niego a que lo vea, pero no tiene derecho a llevarse a mi niño.

Fernanda y César estudiaron hasta la secundaria; ella trabaja viernes, sábado y domingo en una terraza para fiestas y él tiene un local de sonido y alarmas para carros. “Nunca nos casamos, nada más nos separamos”, señala.

Sin embargo, viven relativamente cerca uno del otro. “De hecho, cuando me los encuentro en la calle, él le da rápido a la camioneta o sube los vidrios y agacha al niño para que yo no pueda ver a mi hijo”, relata.

–¿Cómo te trató durante los tres años que estuvieron juntos?

–Él siempre fue agresivo, trataba de golpearme; únicamente me daba dinero para la comida. Yo, embarazada, trabajé, trabajamos juntos pues, ¡para que ahora se porte así, quitándome a mi niño!.

María Fernanda acudió a la Comisión Estatal de Derechos Humanos del Estado de Jalisco (CEDHEJ) para exponer su caso y solicitar asesoría. La institución giró un oficio con fecha del 10 de agosto del año en curso al agente del MP adscrito al municipio de El Salto, dependiente de la Fiscalía General del Estado de Jalisco (FGEJ).

“… sin prejuzgar sobre el caso que nos ocupa, velando en todo momento por el interés superior del menor, le solicito su valiosa colaboración para que se valore la situación en particular de la compareciente y de ser procedente, se recabe su denuncia que corresponda”, se lee en uno de los párrafos de la carta con membrete de la CEDHEJ, firmada por Annett Hernández Navarro, visitadora adjunta B de guardia.

Con esa carta, María Fernanda acudió el 12 de agosto al MP, pero el agente le dijo que no la podía atender porque el sistema se había caído.

CEDHJ El Salto Ministerio Público Partidero Josefina Real
Oficio de la CEDHJ girado al MP de El Salto.

 

La primera visita al MP

Desde la sustracción del menor, Fernanda habló en una ocasión por teléfono con César, “me dijo que no me iba a entregar el niño, que con él está mejor y yo no lo veo así, porque en dos ocasiones se iba a quedar loco; tiene dos expedientes médicos en el Hospital Civil de Guadalajara (HCG).

–¿Por qué dices que se iba a quedar loco, tiene alguna adicción?

-Sí, fuma marihuana y diario toma (bebidas alcohólicas). Mi preocupación es que le pase algo al niño. Yo creo que ya se mete otra cosa, porque toma más.

Asegura que en el HCG existen dos expedientes médicos de su expareja en los que se puede comprobar su problema con las bebidas alcohólicas y con estupefacientes. En menos de tres años ha sido hospitalizado en dos ocasiones; la primera vez estuvo internado durante una semana y la segunda por dos días.

Antes de que César se llevara a su hijo sin el consentimiento de María Fernanda, “vino a mi casa y me quitó una moto nueva que acababa de comprar, ni la he terminado de pagar. Se metió al domicilio de mi mamá, la golpeó, y se llevó la moto con todo y papeles”.

Fue la primera vez que María Fernanda fue al MP para denunciar el robo de la moto y por los golpes que recibió su mamá por oponerse a que se llevaran la motocicleta.

“Me dijeron que no podían hacer nada, que sólo diera de baja las placas. Como unos 22 días después del robo de la moto, él regresó, me preguntó por el niño, se metió a la fuerza a la casa de mi mamá y se lo llevó”.

María Fernanda desconoce el nombre del agente del MP, no tuvo la precaución de recabar su nombre, pero dice que las tres veces la ha recibido la misma persona.

“Hay varios en esa oficina, pero siempre me ha atendido el mismo. Tendrá unos 26 o 27 años, es gordito, de barba y bigote y medio güerito”.

En la misma categoria

Otras Noticias