Guadalajara, Jalisco.- Aunque aún no se han establecido los motivos por los cuales Aristóteles Sandoval, exgobernador de Jalisco, fue asesinado a balazos al interior de un bar en el municipio de Puerto Vallarta, sobre él pesaba una amenaza del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), que en 2018 atentó contra Luis Carlos Nájera, quien fuera su fiscal y secretario del Trabajo.
El 21 de 2018, cuando salía del restaurante Suntory, ubicado en la transitada avenida Chapultepec, en Guadalajara, Nájera fue atacado por un nutrido comando armado, pero sobrevivió, con apenas una herida en la mano izquierda. El ataque fue repelido por escoltas del funcionario, quien recientemente había tomado la Secretaría del Trabajo, luego de años ausencia en el servicio público.
Previamente, Nájera había fungido como fiscal del estado, a las órdenes de Sandoval, pero abandonó el cargo en medio de cuestionamientos por supuestos vínculos con el crimen organizado. En dicho contexto, el funcionario estatal aseguró que las represalias obedecían a su labor anterior en materia de seguridad.
Por su parte, Sandoval respaldó, en conferencia de prensa sobre el caso, dicha premisa: “(los sicarios) tenían como objetivo, de acuerdo a la presunción, de atentar contra la vida del secretario Luis Carlos Nájera, quien hasta hace tres años se desempeñara como fiscal general del estado con una trayectoria de 30 años al servicio policial y desde hace tres meses como secretario del trabajo del estado de Jalisco”.
Al mismo tiempo, el priista reveló que el grupo delictivo comandado por Nemesio Oseguera Cervantes, alias Mencho, no sólo tenía en mente atentar contra Nájera, sino que pesaban amenazas sobre su persona y la de su secretario de Gobierno, Roberto López Lara.
También, rechazó entonces que tras el atentado hubiera un estado de alerta máxima. “Sí he pedido a todas las instancias de gobierno que permanezcan en alerta frente a las posibles reacciones de la delincuencia, como las dos que ya hemos identificado con la quema de dos vehículos”.
Tan sólo una semana después de lo sucedido, ocurrió la detención de Rosalinda González Valencia, esposa del Mencho. El operativo, llevado a cabo por efectivos de la Marina, ocurrió en una elegante zona residencial de Zapopan.
Sandoval, quien tras dejar la gubernatura tomó la titularidad de la de la Secretaría de Innovación y Participación Digital, del Partido Revolucionario Institucional, se encontraba en el municipio costero atendiendo asuntos personales.
El exmandatario había renunciado a dicho cargo en octubre pasado.
“No hay futuro posible para el PRI recurriendo al pasado. No serán los de ayer los que construyan el mañana”, expresó entonces a través de su cuenta de Twitter.
Apenas el pasado 3 de diciembre Sandoval se había reunido con exintegrantes de su Gabinete, como los exsecretarios de Gobierno, Roberto López Lara; de Educación, Francisco Ayón López; de Desarrollo e Integración Social, Miguel Castro Reynoso y demás.
“Aquí caben todos los que con el corazón y la mente están pensando en renovarse y no seguir las estructuras rígidas, viejas y anquilosadas”, fue uno de los dichos del ahora occiso durante la convocatoria.
En estos momentos, desde Puerto Vallarta, el Gabinete de Seguridad de Jalisco ofrece un mensaje #EnVivo sobre los lamentables hechos ocurridos que resultaron en el fallecimiento del ex gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval: https://t.co/DKQiuPoSfL
— Enrique Alfaro (@EnriqueAlfaroR) December 18, 2020
