Ciudad de México.-Durante el tercer y último debate presidencial del 19 de mayo, los candidatos Jorge Álvarez Máynez, Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez expusieron sus propuestas sobre política social.

Xóchitl Gálvez, candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México, comenzó su intervención afirmando: “vengo a defender la vida, la libertad y la democracia”.

En tanto, en Claudia Sheinbaum, representante de la coalición Sigamos Haciendo Historia, inició recordando a los jóvenes de 1968 y mencionando que “hace 56 años ocurrió uno de los procesos más dolorosos auspiciados por el PRI”.

Por su parte, Jorge Álvarez Máynez, candidato de Movimiento Ciudadano, promovió un “voto feliz” y criticó el concepto de “voto útil” como no votar por Morena o el PRIAN, sino mediante una tercera opción, que representa su partido, Movimiento Ciudadano.

En el bloque sobre política social, Álvarez Máynez propuso un salario mínimo de 10 mil pesos mensuales y dos días de descanso a la semana, además de criticar la “vieja política” de vicios y desigualdad. Afirmó que los planes sociales deben evolucionar.

Gálvez, en sus propuestas, aseguró que “los programas sociales se quedan, Morena se va”, y destacó la necesidad de mejorar el acceso a la educación y la salud, señalando que “50 millones de personas no tienen acceso al sistema de salud”.

Sheinbaum defendió los “resultados” de la gestión morenista y prometió continuar aumentando el salario mínimo, así como mejorar la disponibilidad de profesionales y medicinas en el sistema de salud.

Durante el tercer debate presidencial, Xóchitl Gálvez, Claudia Sheinbaum y Jorge Álvarez Máynez se enfrentaron en temas de seguridad y política exterior.

Seguridad

Xóchitl Gálvez criticó duramente al gobierno actual por su gestión de la seguridad, destacando que “ha fracasado con 186,000 personas asesinadas y 50,000 desaparecidas”. Prometió regresar al Ejército a los cuarteles y aseguró que solo realizarían las tareas que marca la Constitución. En referencia a Claudia Sheinbaum, Gálvez reiteró su acusación de ser la “narcocandidata”, citando un libro de la periodista Anabel Hernández, y afirmó haber presentado una denuncia.

Claudia Sheinbaum respondió señalando que en 2006, Felipe Calderón declaró la guerra contra el narcotráfico para validar un fraude electoral, y recordó que su operador, Genaro García Luna, está encarcelado en Estados Unidos. Comparó esto con la situación bajo Enrique Peña Nieto y defendió la estrategia de seguridad del actual gobierno de López Obrador.

Jorge Álvarez Máynez afirmó que la inseguridad se agravó significativamente tras el gobierno de Calderón y se triplicó con Peña Nieto. Prometió que en su gobierno no habría mujeres encarceladas por decidir sobre su cuerpo, ni personas por fumar marihuana. Añadió que, bajo su administración, los mexicanos no tendrían que preocuparse por cuál García es peor, refiriéndose a García Luna y García Harfuch.

Política Exterior

En el ámbito de política exterior, Sheinbaum agradeció a los migrantes por sus remesas y destacó su importancia para la economía. Prometió continuar respetando la Constitución en la política exterior, siguiendo el ejemplo de López Obrador, y declaró que se acabó la sumisión, criticando las políticas de Fox y Calderón.

Álvarez Máynez resaltó que México es más que un territorio, incluyendo a los mexicanos que viven en el extranjero, subrayando la importancia de la diáspora.

Gálvez señaló que la frontera sur está controlada por delincuentes y prometió imponer orden. Criticó la política migratoria de Morena por ser hipócrita y sometida a Donald Trump, y se comprometió a otorgar visas de trabajo según sea necesario.

En cuanto a la economía, Sheinbaum defendió la gestión del gobierno actual, afirmando que México ha recibido la mayor inversión extranjera directa de su historia. Gálvez, por su parte, advirtió que la incertidumbre legal está haciendo que México pierda oportunidades en el nearshoring.

El debate, organizado por el Instituto Nacional Electoral (INE), se caracterizó por críticas, ataques y propuestas en preparación para las elecciones del 2 de junio de 2024. A pesar de que Sheinbaum abogó por un debate limpio y sin calumnias, los tres candidatos terminaron intercambiando descalificaciones, como sucedió en las dos anteriores ediciones.