Perú.-Alan García, expresidente peruano (1985-1990 y 2006-2011), se suicidó la mañana de este miércoles al interior de su domicilio, con la finalidad de evitar una orden de aprehensión relacionada con el caso Odebrecht.
Erasmo Reyna, abogado de García, confirmó ante medios de comunicación que “el presidente tomó la decisión de dispararse en la cabeza”, luego de que la Fiscalía peruana determinara imponerle detención provisional.
De acuerdo con el diario Perú 21, agentes de la policía ingresaron a su domicilio y, cuando estaban a punto de llevárselo, García pidió permiso para ir a su dormitorio; dado que ningún efectivo lo acompañó, aprovechó la oportunidad para darse un tiro.
No obstante, el hombre fue trasladado a un hospital cercano, donde se fue sometido a cirugía. Autoridades peruanas reportaron su estado de salud como “crítico y muy grave”, en principio. Posteriormente se confirmó su deceso.
Alan García era investigado por posibles actos de corrupción durante su último mandato presidencial, cuando habría recibido sobornos de la compañía petrolera Odebrecht.
En noviembre pasado, García fue impedido por la Fiscalía para abandonar el país por un periodo de 18 meses, en tanto continuaban las investigaciones en su contra. Aunque el político pidió asilo diplomático en la empajada de Uruguay en Lima, este fue rechazado.
La orden de aprehensión en contra de García lo mantendría preso durante 10 días, en tanto el Ministerio Público recabara pruebas para llevarlo a juicio.
Odebrecht en México
Los actos de corrupción por el caso Odebrecht se remontan a 2010, cuando la empresa energética─por medio del departamento de Relaciones Estratégicas─creó un fondo para sobornos con la finalidad de obtener importantes contratos públicos con los gobiernos de Angola, Argentina, Colombia, Ecuador, la propia Unión Americana, Guatemala, México, Mozambique, Panamá, Perú, República Dominicana y Venezuela.
Luego de que se diera a conocer el escándalo, en Perú se iniciaron investigaciones contra los expresidentes Alejandro Toledo, Alan García y Ollanta Humala, mientras que el presidente Pedro Pablo Kuczysnki renunció a su cargo en marzo de 2018.
En México, Odebrecht estuvo vinculada al gobierno de Enrique Peña Nieto (en la construcción de una refinería), quien incluso se reunió con el presidente de la compañía. Gracias a esto la empresa aumentó su crecimiento de forma exponencial durante los últimos 10 años.
De acuerdo con declaraciones recogidas en otros países, la trama involucra a Emilio Lozoya, exdirector general de Pemex, a Luis de Meneses, director de Odebrecht en México, a Luiz Mameri, director de Odebrecht en América Latina y a Hilberto Mascarenhas, jefe de la oficina de sobornos.