Viernes 7 de marzo de 2025.- Un golpe para las familias de personas desaparecidas en Tlajomulco de Zúñiga, ya que las acciones de búsqueda programadas para los días 10, 11, 12 y 13 de marzo han sido suspendidas debido a la falta de coordinación entre la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB) y la Fiscalía General de la República (FGR).
Esta decisión no solo pone en evidencia la falta de coordinación, sino que también deja en el aire la legalidad de las búsquedas previstas.
A través de un comunicado, el colectivo Luz de Esperanza explica que lo más preocupante es que la decisión obstaculiza el derecho de las familias a contar con el respaldo institucional que tanto requieren.
La ausencia de un dictamen de la CNB para autorizar las acciones de búsqueda ha dejado en claro que no hay una base legal sólida para la realización de estas tareas vitales.
Las autoridades competentes, y en particular la Fiscalía, no tienen la facultad de decidir de manera unilateral la ejecución de estas búsquedas.
Es indispensable que haya una coordinación efectiva entre las instituciones encargadas, pues, como colectivo, no pueden llevar a cabo estas acciones de forma independiente.
La falta de comunicación y colaboración entre la CNB y la FGR ha tenido consecuencias fatales, ya que no se cumplió con el protocolo necesario para realizar una búsqueda adecuada.
Esta falta de disposición institucional para trabajar de la mano con las víctimas ha dejado a las familias en un limbo, sin respuestas ni certeza sobre el paradero de sus seres queridos.
Tras más de un año de espera, las familias buscadoras ven cómo sus esfuerzos se ven truncados nuevamente por la descoordinación, la indiferencia y la inacción de las instituciones encargadas de atender la crisis humanitaria que afecta a México.
Frente a este panorama, las búsquedas deben ser pospuestas hasta que existan garantías legales, de seguridad y un acompañamiento institucional adecuado.
Las autoridades deben asumir su responsabilidad y garantizar que estas acciones se realicen bajo un marco de legalidad y con el respeto que las familias merecen.
El llamado es claro: no más indiferencia ni excusas. Las víctimas de desaparición forzada en México, y sus familias, exigen justicia.
Es imperativo que las instituciones actúen con urgencia y sensibilidad ante una de las crisis más graves que vive el país.