Los dueños de las gasolineras en México tienen la última palabra sobre un eventual “gasolinazo” al inicio de 2019, pues dependerá de su margen de ganancia si deciden transferir los costos derivados de la suspensión del estímulo fiscal a los combustibles y el cobro total del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS).
El viernes de la semana pasada, la Secretaría de Hacienda informó que “con el fin de preservar el poder adquisitivo de la población”, a partir de hoy se modificó el esquema de estímulos semanales al IEPS sobre gasolinas y diésel, para que el precio de las gasolinas no suba en términos reales, es decir, más que la inflación, cuyo nivel el gobierno estima en 3.4% este año.
La cuota de la gasolina Magna pasó de 4.59 a 4.81 pesos, la de Premium de 3.88 a 4.06 y la de diésel de 5.04 a 5.28 pesos.
En un mercado de precios liberados y con más de 50 marcas extranjeras y nacionales, cada estación de servicio venderá gasolinas al público al precio que le convenga, considerando su margen de ganancia.
Datos del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) a septiembre de 2018 indican que alrededor de 15% del precio final de las gasolinas correspondió a la ganancia del gasolinero más el ajuste de calidad.
Sin embargo, la preponderancia de Pemex en el mercado de comercialización y suministro de combustibles dificulta la competencia en precios.
El último reporte trimestral de Pemex indica que habían 12 mil 7 gasolineras en México hasta septiembre del año pasado y sólo cerca de mil 500 fueron estaciones de servicio con marcas distintas a la empresa estatal.
El precio promedio de la gasolina Magna en México fue de 19.41 pesos en noviembre pasado, la cotización más alta en la historia y fue el décimo sexto aumento semanal consecutivo, de acuerdo con cifras de la Comisión Reguladora de Energía.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha prometido que el precio de las gasolinas subirá sólo lo que indique la inflación en los próximos 3 años y, posteriormente, el precio bajará por la construcción de la refinería de Dos Bocas, Tabasco, y la remodelación de las refinerías actuales.
Con información de El Universal.