Como medida ante la emergencia sanitaria del país por Covid-19, el Gobierno federal ordenó reducir el gasto en los rubros de servicios generales y de operación por lo menos un 50%.
Según un oficio de la Secretaría de la Función Pública del 8 de abril y su titular Irma Eréndira Sandoval Ballesteros, el objetivo es que las áreas administrativas y finanzas de las instituciones no paguen por conceptos no contratados ni comprometan recursos adicionales.
“A fin de liberar recursos para atender esta situación excepcional y en el entendido de que la operación del gobierno ha reducido la ocupación de oficinas y el uso de insumos, les solicitamos que apliquen estas medidas de racionalidad y austeridad en el ejercicio del gasto en cada una de las entidades y dependencias a su digno cargo”.
Los recursos asignados a los servicios generales cubren el costo de todo servicio contratado con particulares o instituciones del sector público, incluyendo los servicios oficiales requeridos para las actividades de la función pública.
Dicha medida no incluye a la Secretaría de Salud, las Fuerzas Armadas y la Guardia Nacional.
“Que están realizando actividades prioritarias para hacer frente a la emergencia sanitaria o dando continuidad a los proyectos prioritarios de la administración. Estas unidades únicamente seguirán sujetas a las medidas de austeridad que dicta la Ley Federal de Austeridad Republicana, así como las disposiciones presupuestarias pertinentes”.
Si la medida no es acatada, el servidor público podrá recibir una falta administrativa sancionable por la Ley General de Responsabilidades Administrativas y la Ley Federal de Austeridad Republicana.
Con información de El Informador