14 de febrero de 2022.- José Ramón López Beltrán, hijo del presidente Andrés Manuel López Obrador y su esposa, Carolyn Adams, negaron cualquier conflicto de interés en su familia y reconocieron trabajar en el ramo energético, pero por su cuenta.
Al dar por primera vez su versión, a través de diferentes comunicados, sobre las acusaciones públicas de tráfico de influencias y de señalamientos de haber rentado una casa en Houston, presuntamente propiedad de un ex empleado de una firma energética que tiene relación con Pemex, la pareja del hijo del mandatario, ofreció entregar todas las pruebas para aclarar y rectificar, dijo, la “noticia falsa” que ha puesto en riesgo “nuestra seguridad y la de nuestros hijos”.
A través de la aplicación Scribd, emitió un documento de hoja y media, por medio de la cuenta de Twitter de su esposo, donde habla de quién es su familia y cómo se inició ella en el sector laboral energético.
Asimismo, mostró una conversación de WhatsApp con su supuesto agente inmobiliario quien le habría rentado la casa en Houston. Un diálogo que demuestra -dijo- que desconocian a quién pertenecía la finca,”que nosotros no teníamos relación alguna con los propietarios, ni conocimiento de quienes eran, ni cuál era su ocupación”.
Dijo contar con todas las pruebas necesarias para ponerlas a disposición de las autoridades en el momento que se requieran.
Hijo de López Obrador se defiende
Por su parte, José Ramón López Beltrán, hijo del presidente, en un breve comunicado también de la misma plataforma Scribd que subió a su Twitter, dijo ser asesor de una empresa privada en Houston y negó tener relación alguna laboral con el gobierno de México.
Negó conflicto de intereses y pidió respeto para su vida privada y la de su familia.
https://twitter.com/_30JR40_/status/1493063734889177092?t=7SXqPG__rr5kJ0u7m4dUUg&s=08
