Hurgar con catalejos

Hurgar con catalejos.

Amado Aurelio Pérez

1990aapc@gmail.com

El lector es una especie en extinción

A finales del siglo XV, con el nacimiento del monasterio de Montserrat en Barcelona, se marca el comienzo de la larga y exitosa historia del mercado editorial en la capital catalana. Es aquí, de hecho, donde en 1499 se instaló la primera imprenta de la ciudad, que publicó en 1500 su primer título. A día de hoy, más del 50% de la producción y la facturación de la industria editorial en España, se produce en la ciudad invitada de honor en la Feria Internacional del libro de Guadalajara, que se celebra desde 1987, con más de tres mil actividades, y cerca de setecientos cincuenta autores según hicieron el anuncio JAUME COLIBONI, alcalde de Barcelona y Marisol Schulz, directora de FIL Guadalajara.

El Premio de Poesía Jocs Florals de Barcelona 2025, reconoció este año el poemario Ítaca arrasada. Joan Deusa Dalmau (Gandía, 1993) es poeta, escritor y gestor cultural.  Con más de un siglo y medio de historia, este galardón es uno de los más antiguos de Europa y del mundo, y se consolida, año tras año, como una plataforma para dar a conocer autores o para consolidar nombres.

Durante los primeros treinta años del siglo XX, la Esquerre de l’Eixample se convirtió en el centro de un verdadero distrito editorial, aglomerando empresas de producción, impresión y distribución. Es aquí, de hecho, que se instalaron la mayor parte de editoriales, imprentas y librerías, marcando el comienzo de un desarrollo que no muestra señales de detenerse.

Hasta principios del siglo XXI, conseguir que una editorial aceptara un manuscrito para su publicación no era una tarea sencilla. Normalmente, cada propuesta pasaba por un proceso de selección y valoración muy estricto, que podía extenderse durante varios meses, con altas probabilidades de ser rechazada por parte de la editorial. Hay que pensar que las editoriales siempre tuvieron una cierta autoridad en el mundo cultural, y tenían la responsabilidad de escoger qué leería la gente.

Esto fue así hasta que alguien decidió cambiar el rumbo de la historia e inventar nuevos modelos editoriales que permitieran que una cantidad mucho mayor de escritores pudiera ver publicado su libro. ¿Cómo? A cambio de una suma de dinero que cubriera los gastos de edición en su totalidad o en parte. Se trata de los modelos de coedición y de autopublicación. De esta forma, los escritores podrían tener su obra publicada profesionalmente y, en algunos casos, verla llegar hasta las estanterías de las librerías. El efecto colateral de esta práctica es, claramente, que las editoriales no tienen ninguna seguridad de éxito ni de retorno asegurado de ventas.

Impresión bajo demanda o consciencia en la tirada elegida: En lugar de imprimir grandes cantidades de libros que pueden terminar en exceso de inventario y desperdicio, una buena elección es pensar en imprimir solo la cantidad necesaria, reduciendo el exceso de producción y minimizando los residuos.

En algunos países como China, México o India el libro digital empieza a tener cierta relevancia, en España siguen teniendo predilección por el formato tradicional: el 52% de personas consultadas leen libros en papel, mientras que el 36% consumen libros en formato digital.  Esto demuestra que los lectores de España aún valoran la experiencia táctil y la conexión emocional que proporciona un libro físico.

Para México, la encuesta del INEGI, sobre consumo cultural, marca un descenso de 14% en la demanda, de los lectores, de la industria editorial mexicana.

Los mexicanos no hemos dejado de leer historietas para leer otra cosa, simplemente hemos dejado de leer, el derrumbe de los monitos es una catástrofe civilizatoria, en el México del 2025, el lector es una especie en extinción.