“Ian” se convirtió nuevamente en huracán este jueves en aguas del Atlántico estadounidense en su rumbo hacia Georgia y las Carolinas, estados a los que ahora amenaza con inundaciones, marejadas ciclónicas y fuertes vientos, tras dejar devastado buena parte de Florida.
Según el boletín del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, a las 17:00 hora local el centro de “Ian” estaba localizado a 390 kilómetros al sur de Charleston (Carolina del Sur), y a 540 km de Cabo Fear (Carolina del Norte).
“Ian”, el potente huracán que causó esta semana destrucción en Cuba y el suroeste de Florida, perdió fuerza en su tránsito por el centro del estado sureño de EU la noche del miércoles y se convirtió en la mañana de este jueves en una tormenta tropical, pero de nuevo sus vientos han tomado fuerza de huracán.
De acuerdo con el NHC, “Ian” se mueve ahora en dirección norte-noreste a 17 km por hora con vientos máximos sostenidos de 120 km/h, o sea, un huracán de categoría 1 según la escala Saffir-Simpson.
En la trayectoria pronosticada, “Ian” se acercará a la costa de Carolina del Sur este viernes y, entre la noche de ese día y el sábado, su centro se moverá más hacia el interior a través de las dos Carolinas.
Los vientos con fuerza de huracán se extienden hacia afuera hasta 75 km desde el centro, y los vientos con fuerza de tormenta tropical se extienden hacia afuera hasta 665 kilómetros, detalló el observatorio con sede en Miami, Florida.
Según el cono de trayectoria de cinco días publicado por el NHC, “Ian” se degradará a depresión tropical este fin de semana al pasar por Carolina del Norte.
Los vientos con fuerza de huracán se extienden hacia afuera hasta 75 km desde el centro, y los vientos con fuerza de tormenta tropical se extienden hacia afuera hasta 665 kilómetros, detalló el observatorio con sede en Miami, Florida.