Por: José Díaz Betancourt
Debe ser una broma porque muy pocos debemos creer que en Jalisco hay 442 indigentes como lo indica el INEGI.
Así que al final igual que nos insisten en que no hay inseguridad porque la percepción de ella disminuyó, nos deben creer muy tontos para no percibir que el número de indigentes que aseguran contar es ridículo.
Otro sesgo falso de este grave problema es que las personas llamadas en situación de calle están en la zona céntrica de la metrópoli, cuando prácticamente cada colonia o barrio tiene sus propios mendigos. La indigencia significa que muchas personas no pueden satisfacer sus necesidades básicas y están por debajo de la línea de pobreza.
Para una zona conurbada como la capital de Jalisco es inadmisible, y ésta real y misteriosa estadística nos refleja la miseria en muchos otros temas de los ciudadanos jaliscienses, donde la indiferencia civil y oficial es una verdad dolorosa.
Pilón
En la glosa, donde un alto funcionario dijo que la numerosa escolta que gozará luego de que deje el poder es grilla barata y lo que menos tiene es que será económica para el erario, otro dijo, imprudentemente, que la capacidad de endeudamiento de Jalisco es aún de 15 mil millones de pesos por lo que el gobierno entrante ya se frota las manos.