Ciudad de México.-El presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, acusó que los terrenos del actual Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) son los que han provocado todo el escándalo para cuestionar la consulta ciudadana por la que se decidió cancelar la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México(NAICM) en Texcoco para llevarla hacia Santa Lucía.
Mediante un video difundido en sus redes sociales, el futuro mandatario reveló que el trasfondo del proyecto del NAICM, por parte de los empresarios, era quedarse con con los terrenos de la actual AICM para convertirlos en un polo comercial similar a la exclusiva zona de Santa Fe, en la ciudad de México.
“Esto va más allá de un negocio legal, legítimo, de las inversiones, el que se respete el estado de derecho. Esto tiene que ver con negocios que se proyectaron al futuro (…) No estaba de por medio la construcción del aeropuerto de Texcoco, sino quedarse con los terrenos del actual aeropuerto”.
Incluso, aseveró haber tenido acceso al anteproyecto de construcción.
“Ya tenían pensado (los empresarios) hacer una especie de Santa Fe en las actuales hectáreas del aeropuerto. Yo entiendo que ya no van a poder hacer ese negocio, afortunadamente los inversionistas y los mercados, así en abstracto, actúan con inteligencia, información, con responsabilidad y a pesar de los escándalos, la bulla, los ataques, no pudieron generar inestabilidad”, afirmó López Obrador.
El tabasqueño acusó que quienes perdieron esos negocios trataron de crear inestabilidad, pero no funcionó.
“Apostaron a eso, hubo un deslizamiento del peso. Por decirlo de manera eufemística, no una devaluación, pero ya se va a recuperar. Además se gana muchísimo con esta decisión porque se evita la corrupción”, dijo.
Y añadió: “La corrupción es el principal problema de México y eso ya debe considerarse como el objetivo a eliminar de parte de nuestro gobierno: cero corrupción, cero impunidad, no va haber interés personal o de grupo, por poderoso que sea, que haga negocios al amparo del poder público”.
Asimismo, el presidente electo llamó a acostumbrarse a la nueva realidad y pidió serenidad ante lo que viene.
“Ojalá se vayan ya adaptando a la nueva realidad, repito: no vamos a cometer ninguna injusticia. Inversionistas, contratistas, todos van a ser atendidos y se les va a garantizar que sus obras puedan realizarse, nada más que ya no en Texcoco, ahora en Santa Lucía. Vamos a llegar a un acuerdo, serénense, tranquilícense”, pidió.
López Obrador concluyó el mensaje diciendo que él no será un presidente de adorno y estará en el poder para ejecutar el mandato de los mexicanos.
“Ya vamos a llevar un cambio en el país. Hay que notificarles a algunos, hay que informarles, que ya es otro México y que yo no voy a ser florero, no estoy de adorno (…) Yo traigo un mandato de los mexicanos: quieren que se acabe, que se destierre, la corrupción y la impunidad; y me canso ganso por acabar con la corrupción”.