La responsabilidad social del rector general de la UdeG

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La epidemia de Covid-19 vino a impactar significativamente en todas las esferas de la vida política, económica, educativa y demás del estado de Jalisco. Las afectaciones han sido muchas, sobre todo en las 6 mil 641 familias que habían perdido a un ser querido al 10 de enero de este año.  udeg

La Sala de Situación de Salud por Covid-19 de la Universidad de Guadalajara (UdeG) pidió a la población de Jalisco extremar medidas sanitarias, pues las últimas tres semanas han sido las más críticas de la crisis sanitaria en la entidad, que ha pasado de un total de 5 mil 444 muertes el 19 de diciembre a 6 mil 641 el 10 de enero. Es decir, un promedio de 58 al día, más del triple que el anterior, que era de 18 diarias desde el 23 de marzo, cuando ocurrió el primer deceso.

La sala, integrada por universitarias y universitarios especialistas en epidemiología, biología molecular, inmunología, infectología, internistas, enfermería y otras áreas, precisaron en su más reciente informe que de 21 días a la fecha el número de contagios creció en forma exponencial, con 23 mil 143 nuevos casos para un total de 55 mil 656 aquejados reconocidos por el gobierno federal.

Ante este escenario, hay actores que han sido fundamentales para  mitigar y contener los efectos pandémicos, es el caso de la UdeG y del propio rector general, Ricardo Villanueva Lomelí, quien desde el primer momento ha generado estrategias claras y eficientes de cuidado y atención a la comunidad universitaria, pero sobre todo, con un alto compromiso social que han beneficiado al ámbito comunitario. Desde la propuesta del primer modelo centinela en el país, la organización de equipos multidisciplinarios de estudio y la conformación de estrategias públicas, hasta el montaje del primer servicio de pruebas PCR abierto al público y la participación en el Radar Jalisco para mejorar la precisión del monitoreo de la epidemia. También, la propuesta de estrategia de reactivación económica y de acciones de economía solidaria que incluyó acciones para proveer alimentos a familias que pasan tiempos difíciles por el desempleo o por el desabasto, hasta distintos modelos para la reactivación económica, de forma planificada y gradual para nuestro estado.

Desde el inicio de la emergencia por el virus SARS-Cov-2, la Universidad de Guadalajara puso al servicio de la comunidad jalisciense el conocimiento, los recursos humanos y la infraestructura necesaria para sumarse al combate de esta enfermedad.

Acciones como la creación de la propia Sala de Situación en Salud por Covid-19, la instalación de 10 laboratorios para realizar pruebas, aportaciones académicas, científicas, atención de pacientes, el apoyo a estudiantes en condiciones vulnerables y a sus familias mediante la entrega de 60 mil despensas, la instalación del call-center, ubicado en la biblioteca pública del estado de Jalisco Juan José Arreola, donde médicos laboran las 24 horas del día, los siete días de la semana, para atender a la población con síntomas de Coronavirus. Ahí mismo asesoran, orientan y canalizan, en caso de ser necesario, a las personas para que se les pueda tomar una muestra en alguno de los 10 laboratorios instalados por la máxima casa de estudios.

Como parte de la estrategia de atención a pacientes se instaló también el Centro de Aislamiento Voluntario para pacientes asintomáticos o con síntomas leves que no pueden estar en casa, debido a circunstancias particulares, para frenar las cadenas de contagio, minimizar el riesgo de enfermar a sus familiares y su entorno social. La implementación del programa Oxímetro en casa, cuyo objetivo es poner a disposición de todas las personas diagnosticadas con Covid-19; un dispositivo clave en la atención de esta enfermedad, que sirve para monitorear el nivel de oxigenación en la sangre, ya que detectar de manera oportuna la falta de oxígeno puede ayudar a evitar el uso de ventiladores en pacientes y salvar vidas. En total fueron adquiridos 2 mil oxímetros a los que puede acceder la población mediante un sistema de préstamo por un lapso de 15 días.

Este espacio es limitado para enumerar todas las acciones que se han emprendido y que han beneficiado directamente a la comunidad jalisciense, como el anuncio de la suspensión de labores administrativas presenciales a partir del 12 y hasta el 23 de enero y el comienzo del ciclo escolar de manera virtual hasta el 22 de febrero derivado del preocupante aumento en el número de contagios. Una medida de alta responsabilidad social del rector general de nuestra Universidad de Guadalajara, en este momento en que Jalisco se encuentra en el peor escenario de la epidemia.

Como universitaria y como jalisciense agradezco que la universidad asuma el rol social que le corresponde frente a las decisiones erráticas y contraproducentes del gobierno del estado. Si los tuviera en mi aula universitaria, solo le diría a Enrique que mire lo que está haciendo Ricardo y le aprenda.

 

 

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@dralupitaramosp

 

María Guadalupe Ramos Ponce es doctora en Cooperación y Bienestar Social por la Universidad de Oviedo, además de investigadora y académica de la Universidad de Guadalajara. Funge también como coordinadora del Comité de América Latina y El Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer en México (CLADEM) en Jalisco.