Jesús Morales Tolama salinas pliego
Un compromiso que hice cuando Andrés Manuel López Obrador estaba en campaña, y ya como presidente electo, fue no darle un cheque en blanco y ser crítico a cualquier acto de gobierno que considerara incorrecto.
El día de hoy, me veo obligado a publicar un acto de crítica al presidente de la República.
Lo hizo TV Azteca en su noticiero nocturno, por medio de su conductor estrella Javier Alatorre, a quien el presidente considera su “amigo”.
Todos tenemos errores, pero debemos ser justos en calificarlos de accidentales o intencionales.
El error, como lo menciona el presidente, lo considero intencional, provocado por el dueño de la empresa para la que trabaja el locutor, el grupo Salinas. Se mencionaron públicamente dos hechos en días pasados: uno, que el que grupo Salinas debe alrededor de 14 mil millones de pesos al SAT, y dos, que las empresas propiedad de Ricardo Salinas siguen operando, por lo tanto cabe la posibilidad de que sean multadas o incluso clausuradas en esta época de crisis sanitaria, para salvaguardar la salud de sus trabajadores.
Sea cual fuere el motivo de lo dicho por Javier Alatorre en su editorial, tiene diferentes efectos negativos: descalificar el loable trabajo de un funcionario de gobierno que está realizando su trabajo con total profesionalismo, y dejar a la ciudadanía en la indefinición de qué hacer en estos momentos.
La medida que hasta ahora se ha implementado ha sido positiva, tan es así que los resultados, sin echar las campanas al vuelo, son bastante alagadores, pensando en que la pandemia no afecte mucho a nuestro país, como ha sucedido en otros países.
De tal suerte que un mensaje como el emitido por Javier Alatorre, el de ignorar las recomendaciones del doctor López Gatell, abre la puerta a que la ciudadanía salga a las calles sin mayor precaucion, y con ello ocasionar el descontrol de las medidas hasta hoy tomadas para evitar se eleve el número de contagios y muy probablemente de resultados letales.
De manera que lo dicho por Javier Alatorre no puede minimizarse, bajo ninguna percepción, y menos con la complacencia del presidente de la República.
Lo hecho por Javier Alatorre y TV Azteca es reprobable, e incluso constituye un posible delito por atentar contra la salud de los mexicanos. Será la instancia judicial la que determine el castigo o pena correspondiente. salinas pliego
Como sociedad, no podemos permitir que se lucre con el oficio periodístico, como lo ha hecho una empresa televisora beneficiaria de una concesión, y menos que la utilice como una medida de chantaje para favorecer a un grupo empresarial.
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