Reynosa, Tamaulipas.-La matanza de al menos 15 civiles en Reynosa, Tamaulipas, registrada el pasado fin de semana, apunta a una lucha de facciones del Cártel del Golfo, que buscan el control de la ciudad, según las primeras investigaciones de la Fiscalía del Estado, comandada por Irving Barrios.
En declaraciones recabadas por EFE, el funcionario estatal indicó que el grupo conocido como Los Metros, que operan en Reynosa, mantienen una violenta pugna contra los Escorpiones, que tiene su base de control en Río Bravo, mientras que Los Ciclones, otro de los bandos criminales en disputa, controlan las actividades criminales en Matamoros.
Lo anterior, explicó Barrios, derivó en la masacre del pasado fin de semana, ya que Los Escorpiones y Los Ciclones habrían hecho una tregua para “desestabilizar” la plaza en Reynosa y provocar la acción de las autoridades en contra del bando rival.
En principio se manejó la versión de que las personas asesinadas pertenecía al grupo de Los Metros. No obstante, las actividades de las personas han permitido conocer que se trataba de civiles que fueron atacados al azar por un comando armado que recorrió las calles de Reynosa.
Entraron disparando a todos lados…, se metieron a las tiendas, ingresaron a un taller mecánico, quitaron teléfonos, robaron vehículos, etcétera, todo con la intención de causar terror en la sociedad y desestabilizar la paz que venía habiendo desde hace algún tiempo”, detalló el fiscal estatal.
Durante los hechos también murieron cuatro presuntos sicarios, que fueron abatidos por la Guardia Nacional. Además, un sujeto fue detenido tras enfrentarse a balazos con la Policía Estatal.
Según Barrios, esta hipótesis de los enfrentamientos dentro del mismo cártel es la que más fuerza toma hasta el momento, a pesar de lo inusual de este tipo de ataques en dicha zona fronteriza.
“Veníamos de tendencia de delitos a la baja y esto viene a ser una mutación en la forma de operar de los grupos criminales aquí en la frontera con Estados Unidos”, puntualizó Barrios.
Los inicios del Cártel del Golfo se remontan al liderazgo de Juan García Ábrego, mientras que el último liderazgo notorio lo tuvo Osiel Cárdenas Guillén, quien fue detenido en 2003 y extraditado a Estados Unidos.
Tras los hechos, el presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó que se realizaran las gestiones necesarias para que la Fiscalía General de la República atraiga la investigación.
Condena López Obrador matanza en Reynosa y ordena atraer el caso
