Ciudad de México.- Recordando a personajes que perpetraron golpes de Estado en distintas naciones, como Victoriano Huerta, Francisco Huerta y Augusto Pinochet, el presidente Andrés Manuel López Obrador descartó que esto pudiera suceder en México, luego de que el general Carlos Gaytán Ochoa declarara en un discurso que México podría transitar hacia al caos.

¿Quién aquí ignora que el alto mando (sin especificar a quién se refería) enfrenta, desde lo institucional, a un grupo de halcones que podrían llevar a México al caos y a un verdadero Estado fallido?”, mencionó Gaytán Ochoa durante un desayuna con las Fuerzas Armadas celebrado el pasado 22 de octubre.

Ante esto y otras descalificaciones del mando castrense, quien mencionó que un sector del Ejército se siente ofendido por el manejo presidencial sobre militares ─y que en la actual administración federal la “ideología dominante, que no mayoritaria, se sustenta en corrientes pretendidamente de izquierda, que acumularon durante años un gran resentimiento”─, el presidente López Obrador se consideró apoyado por una mayoría que no permitiría “el genocidio”.

“¡Qué equivocados están los conservadores y sus halcones! Pudieron cometer la felonía de derrocar y asesinar a Madero porque este hombre bueno, Apóstol de la Democracia, no supo, o las circunstancias no se lo permitieron, apoyarse en una base social que lo protegiera y lo respaldara”, escribió el presidente.

Agregó: “Ahora es distinto. Aunque son otras realidades y no debe caerse en la simplicidad de las comparaciones, la transformación que encabezo cuenta con el respaldo de una mayoría libre y consciente, justa y amante de la legalidad y de la paz, que no permitiría otro golpe de Estado en nuestro país”.

Y puntualizó: “Aquí no hay la más mínima oportunidad para los Huertas, los Francos, los Hitler o los Pinochet. El México de hoy no es tierra fértil para el genocidio ni para canallas que lo imploren”.

Además, el mandatario exhortó a leer la fábula de Esopo titulada “Las ranas pidiendo rey”, cuya moraleja es que  la hora de elegir los gobernantes, es mejor escoger a uno sencillo y honesto, en vez de uno emprendedor, pero malvado o corrupto.