Jesús Morales Tolama óscar chávez
Nos guió musicalmente, nos enseñó a través de sus canciones a conocer la lucha social.
Considerado uno de los grandes trovadores de América Latina, reconocido y amado.
Sus seguidores que llenaban cada año el Auditorio Nacional, para rendirle un merecido homenaje, aunque los festejados eran sus fans que cantaban junto con él sus canciones que sabían de memoria, sin que faltará una sorpresa en cada concierto, nuevas canciones, amigos intérpretes que lo acompañaban.
Se adelanta en el camino, pero sus composiciones, sus parodias, serán un legado de canciones que seguiremos cantando y evocando su memoria.
Sorpresas como haber escuchado en la catedral de Puebla, un diciembre, villancicos navideños, diferentes, a los que escuchamos tradicionalmente. Un investigador de la música de diferentes rincones del país, jactandose de que tenía temas extraordinarios que había rescatado.
La Casita, Macondo, Por Ti, el zopilote, la Niña de Guatemala, un sinnúmero de canciones compuestas por él, otras de amigos compositores y otras más de compositores no reconocidos, pero igual de grandes canciones y con su interpretación haciéndolas de todos los que lo seguimos por décadas.
Lo recordaremos por ser un gran compositor, un gran intérprete, pero no podemos olvidar su participacion en la película Los Caifanes.
También incursionó en el teatro, donde tuvo gran participación y reconocimiento.
Sin dejar de mencionar su participación en los movimientos estudiantiles de los sesentas, donde llevaba consigo su guitarra, cantando la música de protesta, que animaba y acompañaba a los estudiantes en su lucha.
Fue importante su participación en eventos musicales, pero no buscaba los grandes escenarios para llevar su canto, iba a donde lo invitaban sin importar el tamaño del auditorio, cantaba en alguna plaza, muchos de esos conciertos no merecían las grandes carteleras, pero no le importaba, llevaba su canto.
Actor con una vida privada discreta, no le gustaba hablar de su vida privada, no la mezclaba con su carrera.
Simpatizante y promotor del movimiento zapatista, admiró la forma de gobernarse en los Caracoles, simpatizo con el movimiento zapatista cuando menos hasta hace unos años que tuve la oportunidad de entrevistarlo, pero sin entrar en muchos detalles, porque lo consideraba que era parte de su vida privada.
Apenas el año pasado lo reconoció la Secretaria de Cultura de la Ciudad de México, con la distinción de Patrimonio Cultural, pero fue uno de los tantos merecidos, se va el Maestro Oscar Chávez, pero se queda en el corazón de muchos que seguiremos escuchando su músico en esa voz inconfundible que movió conciencias y alegró corazones en los años que estuvo cerca de su gente.
Hasta siempre Macondo
Q. D. E. P.