Menuda tarea se echó en sí Pablo Lemus el pasado 24. Se comprometió el gobernador jalisciense a pacificar Teocaltiche en mes y medio. Esto es, entre el 8 y 10 de mayo, a más tardar, para que dejen de sonar las descargas y no haya más desaparecidos ni víctimas fatales en tan agitado municipio, azotado por el narcotráfico. ¿Cómo lo hará? No dijo y ni sabemos si realmente tiene un plan, efectivo y secreto, o es un desplante promocional, un tente en pie. Démosle tiempo, ¡pero urge!.