Es la segunda ocasión en la que Eduardo Cervantes, presidente municipal de Ixtlahuacán de los Membrillos, declara ante la Fiscalía del Estado, diciendo que lo hizo en calidad de testigo después de que le pidieran comparecer por los hechos en los cuales Giovanni López fue presuntamente asesinado por policías de su municipio.

Cervantes llegó a la dependencia poco antes de las 12:00 horas del medio día, y se retiró tras tres horas de comparecer.

“Estoy aquí atendiendo el llamado de la Fiscalía. Hoy vine a declarar en calidad de testigo, ya les aporté todo lo que yo sé, colaborando para que se esclarezcan los hechos y si hay responsables se castiguen, cuidando también las formas. Lo que todo mundo queremos es que se castigue este hecho”, expresó al retirarse del sitio.

Aseguró que confía en el trabajo de la Fiscalía, a la cual consideró “una institución seria”, por lo que “se pone en las manos de la autoridad” para esclarecer los hechos.

A pesar de que le pidieron su opinión sobre los tres policías de la comisaría de Ixtlahuacán que ya fueron vinculados a proceso con prisión preventiva de un año como medida cautelar, omitió su respuesta.

Dicha comparecencia correspondió a la cita que debió atender el viernes pasado, a la cual no fue “por cuestiones de agenda”, solicitando a la fiscalía que fuese pospuesta para el día de hoy (jueves 11 de junio).

Cervantes es señalado por la familia de Giovanni por presuntamente ocultar la información sobre el fallecimiento del joven la misma noche que lo detuvieron, indicando únicamente que Giovanni les sería devuelto, pero no en qué condiciones.

La familia también comunicó que cuando el caso se dio a conocer, el alcalde les ofreció 200 mil pesos para no mostrar el video en el que se ve como los policías de Ixtlahuacán “levantan” al joven, además de, presuntamente, amenazar de muerte a Christian, el hermano de Giovanni.

Con información de El Informador