Mónica Férnandez Balboa, presidenta del Senado, ordenó posponer la reapertura de la sede para sus empleados y trabajadores, la cual estaba programada para el 15 de junio.
Además, aprobó un programa sanitario en las instalaciones del Senado de la República para prevenir contagios y responder a la ubicación de los casos sospechosos.
Por la tarde de hoy posteó en redes sociales: “en el Senado de la República evaluaremos con todo cuidado la evolución de la situación de riesgos de contagio durante esta fase de la pandemia”.
Comprometió que “con toda la responsabilidad definiremos en los próximos días la transición hacia la reactivación de funciones sin exponer a nadie”.
Así, “en el transcurso de la próxima semana revisaremos la situación y seguiremos informando”.
Como parte de una serie de acciones para evitar contagios, la senadora Fernández incluyó que “en sesiones plenarias de la Comisión Permanente y las que llegara a realizar el Senado en periodos extraordinarios, y las reuniones de trabajo de comisiones, no podría concurrir un número mayor de 50 personas”.
Al respecto dijo que las reuniones que sean convocadas deberán ser para lo estrictamente necesario.
El miércoles 10 de junio falleció Édgar Antonio Onofre Fuentes quien pertenecía a Servicios Parlamentarios, y en mayo Javier Buenfild Baños; secretario particular del senador por Tamaulipas; Américo Villareal Anaya.
También, se sabe del fallecimiento de un trabajador del estacionamiento en marzo, así como de una mujer del servicio de limpieza, y en ambos casos se reportó que dejaron de asistir al lugar en la primera etapa de la emergencia sanitaria.
Las áreas de trabajo del Senado, dependientes de los órganos de gobierno y de las secretarías generales de Servicios Parñamentarios y Administrativos están a la espera de ser llamados para presentarse a sus actividades regulares.
Sobre el personal que participa en la operación de las sesiones a distancia de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, se estima que son 15 las personas que trabajan presencialmente, y pertenecen a informática, servicios parlamentarios y la secretaría técnica de la mesa directiva.
Este jueves, la presidenta del Senado emitió las acciones a seguir para reanudar las actividades presenciales, con base en el Plan Mínimo de Operaciones con el que responde a la emergencia sanitaria en las instalaciones del lugar.
A las medidas ya aplicadas se agrega una decena de acciones. El documento de Fernández Balboa señala que dotarán a todo el personal de cubrebocas y caretas.
Seguirá el protocolo de filtro de ingreso en el que toman la temperatura y aplican gel antibacterial. Quien tenga fiebre pasará al servicio médico para ser revisado.
Todos los accesos, las pareas de los elevadores y los pisos de estacionamiento tendrán tapetes con desinfectantes. Indica que “se intensificarán los trabajos de limpieza y sanitización de los espacios laborales, los cuales se adecuarán a los protocolos de sana distancia”.
También limpiarán exhaustiva y frecuentemente el salón de sesiones, salas de comisiones, oficinas, baños pasillos, elevadores y áreas de servicio de alimentos.
Limitarán el uso del aire acondicionado, y en su caso asegurarán el cambio o limpieza diaria de los filtros.
Hay una instrucción especial para el personal de Resguardo la cual consiste en que “detectará a las personas que no porten cubrebocas y las exhortará a que lo hagan. Dispersarán reuniones en áreas comunes en las que no se observe la distancia requerida”.
Según la señalización del semáforo sanitario de las autoridades del gobierno federal, indica, se podrá determinar la fecha del regreso al trabajo de las personas vulnerables”.
Con información de El Universal