Guadalajara, Jalisco.-Comerciantes de la zona metropolitana de Guadalajara, principalmente artesanos de Tonalá, se manifestaron este jueves contra las medidas que Enrique Alfaro Ramírez, gobernador de Jalisco, ha impuesto de forma obligatoria ─uso de cubrebocas y confinamiento─ para enfrentar la epidemia del nuevo coronavirus.
Con pancartas de por medio, alrededor de 100 manifestantes exigieron al gobierno estatal “que ya nos deje trabajar” pues aseguran que la falta de recursos económicos los dañará más que el propio virus.
Jesús Torres, uno de los inconformes, aseguró que Alfaro Ramírez ha impedido, a través de inspectores municipales, que se desarrollen actividades económicas en casa.
“No está ayudando, pero sí está estorbando. En Plaza de la Tecnología, aparte de cerrarla, mandar a la gente sin el apoyo, sin el sustento, la gente salió a pegar sus números de teléfono, su domicilio para seguir trabajando, para arreglar sus celulares, ¿y qué hizo? Mandó a la bola de perros que tiene por inspectores a quitar todos los letreros. O sea, no ayuda pero sí chinga”, comentó.
Apuntó que él y sus compañeros se encuentran “hartos de este cabrón” por lo que impulsarán la revocación de mandato, aunque mencionó que tras interponer una solicitud ante el Instituto Electoral y de Participación Ciudadad ésta les fue negada “porque para eso sí hay pandemia, pero no hay pandemia para arrestar a la gente que no trae cubrebocas, pero para atenderte en un edifico sí”.
“A ver si es cierto que respeta la decisión de la gente”, dijo.
En tanto, otro grupo de personas gritó”¡fuera Alfaro!” durante varios minutos, apoyándose con altavoces.
Los manifestantes no recibieron respuesta del mandatario, ya que se les informó que en ese momento no se encontraba en su hogar. Esta mañana Alfaro Ramírez se trasladó a Ocotlán para supervisar las obras del Hospital Regional y la entrega de ambulancias.
En este sentido, Torres reprochó el silencio de Alfaro Ramírez, de quien dijo “sabía que íbamos a venir, tan sabía que hay patrullas, hay una reja (protegiendo el ingreso a Casa Jalisco), hay personas de la Fiscalía”.
Otro punto de incoformidad expuesto por integrantes de la Unión Democrática de Comerciantes de Tonalá, Ánimo Jalisco, Tonalá Contra la Corrupción y Tópicos de mi Pueblo fue el sobreprecio de las pruebas rápidas que el gobierno de Jalisco y la Universidad de Guadalajara adquirieron. Esto luego de que la reportera Gloria Reza diera a conocer que la misma prueba, avalada por el InDRE, costaba mil 300 pesos en un laboratorio privado, mientras que el costo al erario fue de casi cuatro mil pesos por unidad.
Foto: Notisistema/ Twitter
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