Guadalajara, Jalisco.- Marco Aurelio Núñez Cué, doctor en Derecho Fiscal de la Universidad Panamericana, concedió una entrevista a Partidero en febrero de este año, para hablar sobre las implicaciones de lo que en ese momento se dibujaba como una “llamarada de petate” de Enrique Alfaro Ramírez, gobernador de Jalisco, quien amagaba con abandonar el Pacto Federal bajo la premisa de un maltrato por parte del gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador a la entidad.
Al considerar que, en la coyuntura, la información es relevante, este medio de comunicación retoma algunas de las impresiones vertidas en ese momento por Núñez Cué en ese momento.
A decir del especialista Jalisco posee la facultad para aislarse del acuerdo, mismo al que se unió voluntariamente en 1979 ─casi al tiempo en que se expidió la Ley de Coordinación Fiscal─, aunque requiere la aprobación del Congreso Estatal, cuya mayoría es representada por Movimiento Ciudadano, partido de Alfaro Ramírez.
No obstante, casi la mitad del presupuesto ejercido cada año por el gobierno jalisciense equivale a las participaciones y aportaciones que otorga la Federación. Para 2020, de no haber sido parte del Pacto Fiscal, el estado habría dejado de recibir alrededor de 81 mil 161 millones de pesos, quedándose con menos de 50 mil millones de pesos.
Para recuperarse del golpe, estimó, Núñez Cué, el estado debería configurar nuevos impuestos.
─¿Qué sucedería si Jalisco decidiera salir del Pacto Fiscal Federal?
─La manera de entrar en el es por medio de un acuerdo de adhesión voluntario, y Jalisco se unió en el (19)79. Tanto para unirse como retirarse, es necesaria la aprobación del Congreso Estatal. Dicho esto, cualquier entidad es libre de retirarse, siempre y cuando cumpla con lo anterior. Pero de hacerlo, Jalisco tendrá que reajustar su presupuesto, además de crear más impuestos estatales, lo cual se traduce en una doble tributación, es decir una carga fiscal excesiva para los habitantes.
─¿Qué hay sobre los impuestos estatales etablecidos por la entidad?
─Los impuestos de Jalisco generan cinco mil millones de pesos, y los obtenidos de trámites como por ejemplo licencias de conducir y pasaportes, 10 mil (millones). Sumados no son nada en comparación con los 58 mil que la federación le da.
Núñez Cué apunta también a que la advertencia de Alfaro Ramírez es únicamente para presionar al gobierno federal, aunque es “imprudente” tocar el tema en un momento de contingencia.
Por si fuera poco, prevé que de concretarse la salida de Jalisco del Pacto, tomaría entre cuatro y cinco años concluir el proceso de desincorporación, además de la revisión del Sistema Nacional de Coordinación Fiscal, las fórmulas de la repartición tributaria y la generación de impuestos propios.
De acuerdo con el gobierno federal, “la recaudación federal participable es el conjunto de recursos que percibe la Federación por concepto de impuestos federales, derechos de minería y una parte de los ingresos petroleros provenientes del Fondo Mexicano del Petróleo. Dicha bolsa de recursos es de suma relevancia para estados y municipios, ya que de ella se desprenden los principales fondos de participaciones que les transfiere la Federación”.
Desde septiembre del año pasado Enrique Alfaro Ramírez, gobernador de Jalisco, amenazó con abandonar el Pacto Federal, argumentando que la entidad es una de las que más dinero aporta a la Federación y, en contraparte, menos recibe.
Según cifras publicadas por Grupo Reforma, Jalisco recibe 0.30 centavos por cada peso que aporta a la Federación.
En ese entonces, al reunirse con sus homólogos de la Alianza Federalista consideró que ninguno de los estados quería romper con el acuerdo, pero que se exigía un trato “justo” a Andrés Manuel López Obrador, presidente de México.
Alfaro Ramírez no es el único gobernador que ha amagado con abandonar el Pacto Federal, ayer, gobernadores de otras nueve entidades lo respaldaron: Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, Durango, Michoacán, Colima, Aguascalientes, Chihuahua y Guanajuato.
En este tenor, el mandatario jalisciense declaró esta mañana que, tomando la palabra a López Obrador, preguntará a la ciudadanía si es su deseo permanecer o abanadonar el acuerdo.
Preguntará Alfaro a ciudadanos si quieren abandonar el Pacto Federal