Guadalajara, Jalisco.-El cura Francisco Severo Maldonado y Ocampo, a solicitud de Miguel Hidalgo y Costilla comenzó a editar El Despertador Americano, el primer periódico insurgente de este continente.
La publicación ─dirigida a los criollos (españoles americanos)─ tenía un costo de dos reales, que equivaldría a más de 100 dólares en la actualidad, con un tiraje de 2 mil ejemplares por edición. Se seleccionó ese grupo, puesto que daba “fortaleza económica, política” al movimiento.
A pesar de su precio elevado, en cuanto salía a la luz, la edición se agotaba, refirió el doctor Carlos Fregoso Gennis, experto en historia, quien ha dedicado al menos 40 años en investigar sobre la vida y obra de Severo Maldonado.
Recordó el autor del libro El Despertador Americano que una vez que Hidalgo se estableció en Guadalajara en noviembre de 1810, mandó llamar a Severo Maldonado. Le encomendó dirigir y editar un periódico insurgente. El académico explicó que el impreso nunca habló de independencia, sino de la intervención napoleónica en España, mostrando su apoyo al rey depuesto Fernando VII.
“Bueno, era un pretexto para finalmente conseguir la independencia” y presentaban el ideario de Hidalgo que era abolir la esclavitud, derechos para los indígenas, entre otros puntos. Sin embargo, Maldonado empezó a meter ideas propias que retomó de autores de la Ilustración de Europa y Estados Unidos, precisó.
El periódico se imprimió en el único taller de imprenta, propiedad de José Fructo Romero, que se ubicaba en una finca de la avenida Alcalde ─antes Santo Domingo─ 225, conocida popularmente como “la casa de los perros”, hoy Museo del Periodismo y las Artes Gráficas.
El 20 de diciembre de 1810 apareció en Guadalajara el primero de los siete números del periódico. El dos y el tres, el 27 y 29 de diciembre respectivamente; el cuatro, cinco y seis, el 3, 10, 11 y 17 de enero de 1811.
El número siete no alcanzó a salir, debido a que entraron los realistas, y solo quedaron impresiones de prueba. Con las ediciones del periódico junto con parte de la biblioteca de Maldonado, la de Ignacio López Rayón y otros revolucionarios los realistas hicieron una pira en la plaza, lamentó el académico.
Contenido de El Despertador
En su libro, Carlos Fregoso explicó que en el primer número de El Despertador Americano aparecieron frases de reproche y proclamas. En el segundo, analizan una carta que el ministro de guerra inglés, conde de Liverpool dirige al brigadier general Layard para justificar su injerencia en los intentos independentistas.
El tercer ejemplar, impreso con carácter de extraordinario, se le atribuye al doctor José Ángel de la Sierra, quien era auxiliar de Maldonado. En cada número se hacía proselitismo en favor de la causa insurgente y cumplía una labora informativa al dar a conocer los principales sucesos de la guerra, haciendo hincapié en las victorias alcanzadas.
El cuarto número se dedicó a “Los americanos que militan bajo las banderas de los europeos Flon y Callejas”, y se incita a los criollos a dejar de pelear al lado de los españoles, ante el riesgo que se corre que América quede en manos de la apóstata Francia y de José Bonaparte.
Félix María Calleja fue considerado uno los principales jefes del virreinato y calificado como el más represivo, mientras que el intendente, Manuel de Flon era señalado de ser un “monstruo”. Éste último murió el 17 de enero de 1811, en la contienda del Puente de Calderón cuando combatía contra los insurgentes, en la cual perdió Hidalgo y motivó su huida al norte.
En el quinto ejemplar se buscó informar que los realistas distorsionaban los acontecimientos y desprestigiaban el movimiento de Hidalgo. En el sexto número, que se imprimió con carácter de extraordinario se reporta que las fuerzas armadas norteamericanas, en la frontera con Texas, apoyan a los insurgentes.
En el último número, el siete, protestaron por la atrocidades y desmanes cometidos por Calleja y Flon, al reconquistar Guanajuato.
La única colección original completa de El Despertador Americano está en manos del Fondo Toribio Medina, de la Biblioteca Nacional de Chile, la cual es considerada tesoro nacional.
¿Traidor?
Luego de la derrota de Hidalgo en el Puente de Calderón, su círculo cercano huyó y se escondió, incluido Severo Maldonado, quien fue puesto a disposición del comandante general de los realistas, José De la Cruz, famoso por ser sanguinario.
A los pocos días de tener contacto con De la Cruz, el presbítero publicó El Telégrafo de Guadalajara contrario a todas las ideas de El Despertador Americano.
Maldonado reveló que fue obligado, pero nunca explicó el porqué. Con la investigación que ha hecho, Carlos Fregoso junto con otros historiadores concluyeron que su hermano, Rafael Antonio Leandro ─que se había adherido al movimiento de independencia antes que Severo-─ traía el armamento de Estados Unidos que enviaba el cura José María Mercado a San Blas, para después distribuirlo en Guadalajara, lo encarcelaron y condenaran a muerte.
Esto provocó que Maldonado negociara su libertad y la de su hermano con De la Cruz, a cambio de dirigir y redactar El Telégrafo de Guadalajara que apareció por primera vez el 27 de mayo de 1811, y está dedicado al virrey de Nueva España.
Rafael fue indultado como demuestran documentos, sobre Maldonado no existe tal registro, solo apareció el periódico, subraya Carlos Fregoso.
Tras 85 números, el último ejemplar de El Telégrafo de Guadalajara se dejó de imprimir el 11 de febrero de 1813, para dar paso al Mentor Provisional. De este solo aparecieron tres números, le siguió Mentor de la Nueva Galicia, con 27 ediciones, que también sería un órgano de difusión realista, y que dejó de circular por falta de suscriptores. Todos fueron dirigidos por Maldonado.
Propuestas revolucionarias
Severo Maldonado nació el 7 de noviembre de 1775, en Tepic, actual capital de Nayarit. Sus padres fueron Rafael Maldonado y María Teresa de Ocampo quien murió cuando era muy pequeño Severo. Fue cura de Ixtlán, Mascota y Jalostotitlán.
A sabiendas de su inteligencia, Maldonado era “vanidoso y presumido” incluso en una reunión en el cabildo de Guadalajara se atrevió a decir que sus integrantes eran como el arca de Noé “‘animales de toda especie’”. Al final de su existencia, dijo que México “‘era un país de orangutanes y el único pensante soy yo’”, refirió el académico.
Es considerado periodista, filósofo, sociólogo, utopista y economista por el legado social que dejó, pero que no fue tomado en cuenta por “estar adelantado a su época”.
Entre las obras de Maldonado que rescataron se encuentra El Nuevo Pacto Social, primer proyecto constitucionalista que existen en el occidente de México, expone contenidos desconocidos para su época como defensa contra los abusos de autoridad, todo individuo debe estar exento de todo género de violencia, se debe respetar sus bienes, su trabajo y su persona, en la enseñanza superior que se imparta lecciones de derecho militar, de economía y de arte militar, además, la creación de un Banco Nacional.
En El Contrato de Asociación, para la República de los Estados Unidos del Anáhuac, establece el ejido, el federalismo en México, gratuidad de la educación -incluía a la mujer-, facilitar la libertad y la migración que están bajo el imperio de los tiranos del nuevo mundo, hacer cooperativas en zonas rurales. El Triunfo de la Especie Humana sobre los Campos Elíseos del Anáhuac es el antecedente del Plan Puebla-Panamá.
Carlos Fregoso espera que la autoridad de Jalisco y Nayarit reconozca el “tamaño intelectual de este personaje, de grandes dimensiones”, al estar a la estatura de grandes pensadores. Se desconoce dónde fue sepultado Maldonado.
