El Comité Ciudadano de Defensa Ambiental de El Salto criticó al gobernador de Jalisco, Pablo Lemus Navarro, por encabezar un gobierno carente de identidad y compromiso social, luego de calificar, entre otras cosas, como “tercermundista” y una “lata de sardina” al servicio de transporte público en la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG).
El comité cuestiona, entre otros puntos, cuándo fue la última vez que el gobernador abordó el Macrobús que circula por el Periférico sin estar escoltado por guardias de seguridad. También califica de inútil a la Secretaría de Transporte, encabezada por Diego Monraz Villaseñor, al considerar que carece de la capacidad para poner orden en el sistema.
Señalan que, mientras miles de ciudadanos padecen congestionamientos diarios, el mandatario estatal se traslada en camionetas blindadas, escoltado por patrullas y vehículos de movilidad que le abren paso, evitando así los problemas cotidianos de tráfico. La ciudad, aseguran, se ha convertido en un “Frankenstein” urbano debido a las ocurrencias de ingenieros civiles mediocres.
Las obras en la carretera a Chapala también son objeto de crítica. Según el comité, estos trabajos únicamente benefician a los concesionarios del transporte, como la Alianza de Camioneros de Jalisco.
Además, consideran que la intención de implementar una nueva línea de Macrobús responde a un capricho de Lemus Navarro, con el objetivo de convertirla en una “caja chica” cuando deje el poder, al igual que ocurrió con el entonces gobernador panista Emilio González Márquez, con la complicidad de Diego Monraz, a quien califican como el “eterno tamarindo” del estado.
La falta de movilidad en la carretera a Chapala ya es una realidad, aseguran. Prueba de ello son las hasta dos horas que deben invertir, tanto de ida como de regreso, los habitantes que se trasladan diariamente a Guadalajara.
Finalmente, lamentan el conformismo de los usuarios del deficiente transporte público, ya que —según advierten— su silencio y actitud sumisa los condenan a sufrir problemas como la invasión de la privacidad en los camiones saturados, comúnmente llamados “latas de sardina”.
