Guadalajara, Jalisco.-El vicepresidente nacional de la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos (Conatram), Manuel Sánchez Benavides, reveló durante la inauguración de la Cumbre de Negocios del Transporte que las preocupaciones de su sector son la inseguridad, el bajo crecimiento económico y la amenaza de incrementos arancelarios de Estados Unidos.

“El país vive su peor momento en materia de seguridad, problema que está estrechamente ligado a la corrupción y a la impunidad, y a la falta de un estado de derecho, podemos decir que nos encontramos en una situación de alta vulnerabilidad en el país para desarrollar la actividad que tanto requiere este país: los autotransportistas”, reclamó.

Para abatir el promedio de 80 robos diarios que padecen los autotransportistas en las carreteras del país, propuso “una alianza de la sociedad con todas nuestras autoridades de los tres niveles de gobierno”, robustecer el marco jurídico y la inclusión de los sectores productivos.

Además, ante la contracción del 2% de la economía de México en el primer trimestre de 2019, y “las amenazas de los incrementos arancelarios de un 5 hasta un 25% a nuestras exportaciones”, pretende que se impulse el consumo interno, la inversión, y “promover el gasto público productivo”.

Luego del reclamo que hizo el vicepresidente de la Conatram sobre la inseguridad que padece su sector, el diputado federal, Víctor Manuel Pérez, integrante de la comisión de Comunicaciones y Transportes recordó que en noviembre pasado, se reformó el artículo 19 constitucional, para que ahora el robo de autotransporte de carga se considere delito grave, y que a los presuntos delincuentes se les d{e prisión preventiva.

Adelantó el legislador que presentará una propuesta para que se tipifique como delito la comercialización, portación y el uso de inhibidores de GPS o rastreadores, que son empleados en un 75% de los robos a camión de carga con el fin de evitar que sean localizados los vehículos.

También refirió que la Secretaría de Hacienda en este año dará “facilidades administrativas y estímulos fiscales para el sector de carga”, como son las facilidades de comprobación, adquisición de combustibles y el estímulo del peaje.