Un nuevo desencuentro se registró entre el gobernador, Enrique Alfaro Ramírez y la prensa en Jalisco, luego de que este “reventara” una entrevista que realizaban periodistas al secretario de Salud, Fernando Petersen, al que ordenó suspender las respuestas.

En ese momento, la periodista especializada en temas de salud, Rocío López, cuestionaba al secretario ante la falta de medicamentos en el hospital regional de Zoquipan, justo en el momento en que Enrique Alfaro pasó y ordenó a su empleado, que dejara de brindar la entrevista y se lo llevó, argumentando que había personas que solo acudían con otro fondo a preguntar.

Gobernador.- “Sabes qué, vamos cancelando esta entrevista, no hay entrevistas. Yo siempre jalo con los medios, doy entrevistas, pero hay quienes vienen nomás a…”

Ante ello, Guadalupe Ramos Ponce, vicecoordinadora de Comité de Latinoamérica y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (Cladem) denunció el registro de más de mil 323 agresiones contra mujeres periodistas en el país durante los últimos años, en el marco de la realización de su labor profesional y el intento de descrédito de la actividad que se realiza por parte de las profesionales de la comunicación. A esa cifra se suma un ejemplo más.

Guadalupe Ramos Ponce denuncia: “Lo ocurrido hoy es un ejercicio de violencia explícita con esa idea que se tiene de un gobernador que no escucha, que no atiende y que se va normalizando, como si fuera parte de su carácter y eso no tiene que normalizarse. Esto pasa por las relaciones violentas… De ninguna manera se puede justificar lo que realiza el gobernador en su forma de ser en el ejercicio de violencia y menos cuando se trata de una mujer en su labor del ejercicio periodístico. No es normal que interrumpa de esa manera y que violente, que interrumpa de esa manera y que desacredite de esa manera. Eso no se tiene que normalizar”.