Al menos 180 mdp después, el Ángel Leaño concluye ciclo Covid-19

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Guadalajara, Jalisco.-El Hospital Ángel Leaño, propiedad de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG) dejó de otorgar servicios a pacientes Covid-19, informó la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) a través de un comunicado de prensa con fecha de 28 de abril.

El 13 de junio de 2020 Partidero reveló que el nosocomio privado recibiría una inversión pública de 180 millones de pesos.

En abril, también del año pasado, Alejandro Guzmán Larralde, coordinador de Desarrollo Económico, detalló que de los 180 millones de pesos, 35 se canalizarían para la obra civil e infraestructura y 75 para su operatividad, mientras que el restante sería una aportación de fundaciones y sociedad civil.

“El Gobierno de Jalisco mantendrá las instalaciones de momento, listas para ser ocupadas si la demanda de camas de hospital vuelve a requerir de este espacio, el cual fue útil para desahogar la carga de otras unidades hospitalarias”, señala el comunicado.

“Debido a que actualmente en todo Jalisco la ocupación hospitalaria se encuentra en un 8.1 por ciento de la capacidad total instalada, se decidió concentrar a todos los pacientes Covid-19 que requieran atención médica al Hospital Geriátrico del Hospital General de Occidente (Zoquipan), acondicionado para tal fin”, abunda.

El contrato de comodato entre la UAG y el gobierno de Jalisco no será renovado, concluye en junio próximo.

“Todo el equipamiento es propiedad del Estado y de no requerirse más del servicio será entregado a hospitales del OPD Servicios de Salud Jalisco”, concluye el documento.

Y aunque la prestación de servicios del hospital privado llega a su fin, la cifra de dinero público que en él se invirtió no ha sido revelada en su totalidad.

En una revisión al portal de transparencia focalizada del gobierno estatal (https://coronavirus.jalisco.gob.mx/ejercicio-del-gasto) Partidero encontró que hasta el momento sólo se ha estipulado un monto de alrededor de 36 millones de pesos.

Por ejemplo, la partida más nutrida que se encuentra en el ejercicio del gasto corresponde al “servicio integral de optimización y racionalización de espacios”, que se adjudicó al corporativo Gasil Desarrollos y Construcciones, por 16 millones 349 mil pesos.

También hay otra partida de 4 millones 333 mil pesos, entregados a Praxair México para la “instalación y reparación de suministro de gases medicinales”.

Por otro lado, la cifra invertida en el nosocomio habría sido mayor, al menos en lo que a su operación respecta, ya que en noviembre de 2020 se anunció la extensión del contrato de comodato, que inicialmente concluiría el día 31 de ese mes.

A los gastos que el gobierno estatal realizó in situ hay que sumar también 2 millones 300 mil pesos que se autorizaron para la llamada Conexión Médica, que incluyó una ruta para personal de salud del Ángel Leaño.

Dese su reinauguración para pacientes Covid-19, casi al término de junio del año pasado, el hospital Ángel Leaño recibió críticas por ser subutilizado. Por ejemplo, dos meses después de su puesta en marcha, diversos medios de comunicación revelaron que, para ese momento, sólo atendía de manera presencial a 20 personas.

El Sistema de Información de la Red de Infecciones Respiratorias Aguadas Graves da cuenta que el hospital Ángel Leaño tenía una ocupación general de apenas el 4% desde hace una semana.

Antes de su rehabilitación con dinero público, el nosocomio se encontraba cerrado y funcionaba sólo como sitio para alumnos de la UAG realizaran prácticas.

En junio de 2020, Alfonso Petersen Farah, vicerrector de Ciencias de la Salud de la UAG, aceptó que una vez pasada la crisis sanitaria el hospital abriría nuevamente al público.

–Cuando volvamos a lo que llaman la nueva normalidad ¿el hospital Ángel Leaño volverá a funcionar como hospital?─, se le preguntó entonces.

─Totalmente. Desde un principio, cuando se tomó la decisión de cerrar el hospital, yo todavía no estaba colaborando en la UAG. Se decidió hacer una reestructura de su operación y volverlo abrir lo más pronto que se pudiera.

 

Con información de Josefina Real y Miguel De Híjar.

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