Guadalajara, Jalisco.-Es una “grosería” que la Fiscalía del Estado de Jalisco (FEJ) ofrezca una recompensa de un millón de pesos a quien brinde información de un hombre y de una mujer supuestamente relacionados con el crimen del exgobernador de la entidad, Jorge Aristóteles Sandoval Díaz.
El especialista en temas de seguridad y criminalística, Alfonso Partida Caballero, aseguró a Partidero que lo que hace el fiscal Gerardo Octavio Solís Gómez “es un gambito, es un término en el ajedrez, es decir, una broma de muy mal gusto”.
En la conferencia de prensa transmitida ayer a través de las redes sociales, ni el fiscal, ni Juan Bosco Pacheco, secretario de seguridad, ni Ricardo Sánchez, coordinador del gabinete de seguridad, detallaron de qué se les implica a los jóvenes exhibidos en una fotografía, “tampoco sabemos si la fotografía corresponde al día de los hechos”, señaló.
El también integrante del Observatorio de Seguridad y Justicia de la Universidad de Guadalajara comentó que en Estados Unidos existe la figura de ofrecer recompensas, pero se emite cuando la autoridad comprobó la culpabilidad de quien se busca, y en el caso de la y el joven señalados por el fiscal no se sabe si participaron o no en el asesinato de Sandoval Díaz.
“Es denigrante y sospechoso que la Fiscalía le esté poniendo precio a las cabezas de personas cuando no se tiene la certeza de si cometieron algún ilícito”. Agregó que en Jalisco no existe alguna reglamentación que avale a la Fiscalía estatal para otorgar recompensas.
El exgobernador jalisciense fue asesinado el 18 de diciembre en el bar Distrito 5, en el municipio de Puerto Vallarta.
Alto grado de complicidad
Para Partida Caballero, la FEJ hace investigaciones periféricas para desviar la atención y no llegar a la verdad sobre el crimen del exmandatario estatal.
La primera fue la captura de dos mujeres; “se les detiene y acusa de encubrimiento pero no de homicidio”; el segundo caso fue la detención de un hombre, quien supuestamente ofreció dinero para que lo liberaran; “lo acusan de cohecho y no de homicidio”, y el tercero y más reciente es ofrecer recompensa a quien otorgue información sobre un hombre y una mujer exhibidos en una fotografía.
“Veo un alto grado de complicidad de no querer llegar al fondo del asunto; andan por las ramas, el asunto es el homicidio. Ellos (los funcionarios de la Fiscalía) saben bien quién fue, está muy claro, fue el crimen organizado, tienen que ver a los personajes que viven en Puerto Vallarta, porque todo mundo sabe quienes son los dueños de la plaza”.
Aseguró que para resolver el crimen de Sandoval Díaz, la Fiscalía tiene que indagar cuatro líneas de investigación: la financiera o negocios en los que estaba el exgobernador, sus relaciones afectivas, la situación política y la línea del crimen organizado, “todo lo demás es una desviación”.
Sostuvo que “la Fiscalía hace una investigación bajo sospecha”.
-¿No ve ningún acierto en la investigación del homicidio de Sandoval Díaz?
-Los únicos aciertos de los que se conocen son los que se hacen en flagrancia, en este caso la Fiscalía no tiene la cadena de custodia porque fue alterada; desgraciadamente en el lugar de los hechos no hay nada, levantaron todo.
El especialista agregó otro dato: la declaración del comisario de Puerto Vallarta, Misael López Muro, quien aseguró que los policías municipales atendieron en un minuto el reporte de agresión en contra del ex mandatario estatal. “Si fue así, quiere decir que son parte fundamental de la alteración del lugar de los hechos”.
-¿Son corresponsables?
-Son cómplices.
–A eso que llama alto grado de complicidad, ¿cree que llegue hasta el ejecutivo estatal?
-Por supuesto, ¿quién puso y para qué lo puso de fiscal?Entonces, por supuesto que está informado. Como dice el constitucionalista Cosío Villegas: todos los gobernantes tienen su estilo para gobernar. Y el estilo de gobernar de Enrique Alfaro es tener el control y la información total, incluidas las investigaciones criminales.
Ofrece Fiscalía un millón de pesos por implicados en homicidio de Sandoval