Por Raúl de la Cruz
L+Viernes 01 de diciembre de 2022.- En la FIL unos amigos y compañeros periodistas me preguntaron sobre la suspensión de las corridas de toros en Guadalajara. Aunque no soy taurino, pero cubrí la fiesta por muchos años.
De hecho, estuve presente, por azares del destino en la inauguración de la Plaza de Toros Monumental de Jalisco, hoy plaza de toros Nuevo Progreso.
En el Progreso que derrumbaron en la gestión de Flavio Romero de Velazco para construir la Plaza Tapatía, tuve la oportunidad de ver a grandes figuras como el “Cordobés” Palomo Linares, Manolo Martínez y Eloy Cavazos, entre otros. Me declaro “villamelon” porque solo aprendí los aspectos elementales para escribir crónicas y notas informativas.
Guardo un recuerdo de David Silveti, un torero que se paseaba en el umbral de la muerte. Su ejercicio era temerario. Fui testigo de la única muerte que se ha presentado en el ruedo en la persona de Alberto Bricio quién fue herido de muerte por el novillo “Fistol” en junio de 1993.
Dicen los que saben que para entender la fiesta hay que saber sobre la etología del astado, su crianza y sus ancestrales orígenes, es decir, el toro bravo apareció desde el nacimiento de la humanidad, según pinturas rupestres en diferentes construcciones alrededor del mundo.
Esa especie, según estudios antropológicos, “No sirve” para otra cosa más que para salir al ruedo porque además su carne no es comestible para el consumo humano. Es el animal que representa la histórica lucha del hombre contra la bestia. El hombre convirtió ese dominio en “arte” a través de la tauromaquia. Todo eso lo tratamos en la FIL hace como diez años. En ese evento acudieron personalidades de la fiesta, psicólogos, antropólogos, sociólogos y representantes de los “animaleros”.
Ahora con la suspensión de las corridas por parte del ayuntamiento de Guadalajara poco tiene que con los reclamos de los “animaleros” quienes, por cierto, han esgrimido muy pobres argumentos en su festejo, todos plagados de supina ignorancia. Es falso que el animal “sufra”, repito, es necesario estudien la etología y fisiología del toro bravo. La suspensión responde a intereses políticos perfectamente identificados. El grupo en el poder precisa de los votos de este numeroso gremio. Los está usando.
La fiesta es necesaria porque forma parte de la idiosincrasia del pueblo mexicano. La tauromaquia existe desde tiempos inmemorables y es una actividad que genera una derrama económica nada despreciable.
Por el otro lado, al recorrer los pasillos de la FIL y hurgar entre las editoriales me di cuenta que incluyeron diversos textos relacionados con las actividades físicas y el deporte. Lo que acapara la atención es la gran cantidad de obras relacionadas con el futbol.
Existen libros técnicos, novelas, cuentos largos y cortos, poesía. Y por supuesto, “La Historia de una Pasión: Leones Negros”, en el stand del STAUDEG. Por cierto, el único libro de futbol editado por la Universidad de Guadalajara. Lo que se extraña son los eventos relacionados con el deporte.
(Foto principal: Milenio)
