Guadalajara, Jalisco.- En dos ocasiones en los últimos años, juzgados radicados en Jalisco han estado inmiscuidos en la liberación de los antiguos líderes del narcotráfico en México, de madrugada y en fin de semana, complicando la acción de la Fiscalía General de la República o sus similares en la localidad.
En agosto de 2013 se dio a conocer la liberación de Rafael Caro Quintero, apodado el Narco de Narcos, fundador del Cártel de Guadalajara, una de las primeras asociaciones delictivas del país, allá por la década de los años 80. Bajo dicha organización se formaron nuevos capos de la droga, como Joaquín “Chapo” Guzmán o Héctor Palma Salazar, quien lideró el negocio durante la década siguiente.
A Caro Quintero lo liberó un juzgado federal con sede en Guadalajara un viernes por la madrugada, con la justificación de que el capo fue juzgado en forma indebida por el asesinato de Enrique Camarena Salazar, agente encubierto de la DEA.
Según la causa el narcotraficante debió ser juzgado en el fuero común y no en el federal.
Caro Quintero había sido sentenciado a 40 años de cárcel por el homicidio de Camarena, pues en la legislación vigente en 1985 no se podía imponer una sanción mayor, con base en el artículo 25 del Código Penal. No obstante, sólo purgo 28.
Su detención ocurrió en 1985, en Costa Rica.
Previo a su liberación, el capo de la droga estaba recluido en el penal de máxima seguridad en Jalisco. Según la prensa especializada, a Caro Quintero lo esperaba una camioneta negra, en la cual se montó apenas saliendo de la prisión, sin que se le haya visto nuevamente.
La periodista Anabel Hernández se entrevistó con él tiempo después y aunque Caro Quintero negó en ese momento haber vuelto al trasiego de drogas, especialistas en el tema del narcotráfico señalan que a través de alianzas con el Cártel de Sinaloa ha vuelto a recuperar territorio y su organización se extiende dese Chiapas hasta Sonora.
Actualmente, el gobierno de Estados Unidos ofrece una recompensa de 20 millones de dólares por quien ofrezca información que lleve a la captura de Caro Quintero.
Bajo el mismo tenor ocurrió la absolución de Héctor Luis Palma Salazar, apodado el Güero, quien lideró el trasiego de drogas en Sonora, ya para lo que hoy es conocido como el Cártel de Sinaloa.
El pasado sábado, durante la madrugada, Juzgado Segundo de Distrito de Procesos Penales Federales, también en Jalisco, ordenó su inmediata liberación, dando un plazo de 48 horas, próximas a cumplirse, para revisar si el narcotraficante no tenía alguna causa pendiente que lo mantuviera tras las rejas.
Palma Salazar se encuentra recluido en el Altiplano, luego de purgar condena en Estados Unidos. Previo a su extradición, el Güero pasó 12 años también en Puente Grande, donde además coincidió con Guzmán Loera.
A decir del periodista Héctor de Mauleón, especializado en el crimen organizado, los antiguos capos del narcotráfico buscan recuperar lo que alguna vez fue su territorio.
“Hasta anoche no había llegado nada (para retener al Güero Palma). Fuentes de inteligencia señalan que Caro Quintero ya envió la señal que al Güero Palma le hacía falta: los viejos capos van por el control del territorio.
Por otro lado, De Mauelón también señala que Caro Quintero se perfila como suplente natural de Ismael Zambada, quien durante décadas se ha mantenido lejos del alcance de la justicia y al frente del Cártel de Sinaloa, que actualmente mantiene una pugna con el Cártel Jalisco Nueva Generación, liderado por Nemesio Oseguera Cervantes, alias Mencho.
“La misteriosa liberación del Güero Palma”, mi columna de hoy en @El_Universal_Mx.
? https://t.co/NTO04e6dsM— Héctor de Mauleón (@hdemauleon) May 3, 2021
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