Ciudad de México.- Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud, desmintió al gobernador Enrique Alfaro Ramírez, quien ha asegurado la importancia de utilizar pruebas rápidas de detección como método efectivo para combatir la propagación de Covid-19, explicando que dicho insumos no son efectivos e incluso se ha invocado información errónea al respecto.
Esto luego de que Alfaro Ramírez sugiriera que la Federación ha impedido que Jalisco adquiera los test e incluso sugirió que si López-Gatell intentaba “cuidar la estadística” sobre el avance del virus en el país, estaría cometiendo “un acto de traición a la patria“.
En rueda de prensa, el funcionario federal explicó que no hay una correlación entre el uso de pruebas rápidas en países como Alemania y Corea del Sur y el control epidemiológico.
“Se decía (en redes sociales y medios de comunicación) que la consecuencia de pruebas rápidas era un buen control epidémico, porque de manera muy notoria Alemania tiene una baja letalidad, una baja proporción de personas que han muerto por Covid-19”, apuntó.
En este sentido, el susbsecretario reconoció que la presión para que México utilizara pruebas rápidas “era fuerte” e incluso diversas compañías farmacéuticas y distribuidoras se acercaron al Estado mexicano para ofrecerlas.
Para desmentir la efectividad de las pruebas rápidas, abundó, se estableció contacto con autoridades de Alemania y “el Robert Koch Institut (máxima autoridad académica en términos de salud pública) nos notificó que este país no realiza pruebas rápidas. Ninguna autoridad sanitaria del mundo las ha acreditado. No es una resistencia nuestra; si no son competentes, no tenemos por qué utilizarlas”.
Mencionó que los países de la Unión Europea “no tienen a ninguna prueba rápida reconocida como útil para esta epidemia”.
Sobre la supuesta acreditación de Estados Unidos a una prueba rápida, la institución a la que se atribuí la noticia también descartó los dichos.
“Extendimos la búsqueda a Canadá, al Instituto Nacional de Microbiología, lo mismo: Canadá no utiliza pruebas rápida”.
Recordó que la Organización Mundial de la Salud también ha dicho que ninguna prueba rápida se ha acreditado como útil. En este sentido, Alfaro Ramírez ha asegurado en diversas ocasiones que la intención de aplicar pruebas rápidas es por recomendación de dicho organismo.
Finalmente, explicó que el rapid test presentado por Donald Trump, presidente de Estados Unidos, no es lo mismo que una prueba rápida (que ofrecen un resultado prácticamente inmediato), sino que recaba muestras analizadas en laboratorio.
“En resumen: no hay pruebas rápidas competentes hasta el momento. Ni México, y asumo que tampoco otros países, tiene una resistencia programada a no usar pruebas rápidas, pero si no son competentes no tenemos porqué usarlas”, concluyó López-Gatell.
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