Guadalajara, Jalisco-. Gibrán Ramírez, aspirante la dirigencia nacional del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), aseguró que los también candidatos Porfirio Muñoz Ledo y Mario Delgado han generado división en el núcleo partidista, por lo que no piensan en la undiad.
“Lo peor que nos puede pasar es salir más peleados que antes de la parálisis del partido con Yeidckol y Bertha (Luján)… De estos no se hace uno, tenemos que unificar todos los esfuerzos y hacer una plataforma multimedia para acompañar al presidente”, declaró al respecto.
En entrevista con El Occidental, el joven analista descartó que tanto Marcelo Ebrard, titular de Relaciones Exteriores, y Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la capital del país, estén involucrados en la pugna interna del partido.
Ramírez detalló que Morena ha perdido al menos dos años debido a sus diferencias, por lo que si llega a ganar el partido acompañará a Andrés Manuel López Obrador, presidente de la República, y defenderá la autonombrada Cuarta Transformación.
Al respecto señaló que el partido político ha desaprovechado los recursos que tiene para generar un medio de comunicación que les ayude a difundir el contenido e ideología morenista, además del ya existente Regeneración.
También propone una mínima institucionalidad con el fin de “tapar la partida de López Obrador (de Morena)”; para lo cual necesitan un departamento de encuestas que no sean analizadas en la Ciudad de México y lleguen a decirles quiénes son los candidatos.
Además, enfatizó que se necesita un Observatorio de cargos electos y gobiernos locales de Morena para responder por los presidentes municipales, regidores y diputados locales.
“Ya que una parte del descontento y descenso respecto a otros años, se debe al nivel local de Gobierno y decepción de muchos, que se perpetuarán si se postulan esos mismos candidatos a presidencias municipales o salten a otros cargos”.
También, su propuesta incluye una coordinación nacional de alcaldes y una de diálogo con movimientos sociales, vecinales y sindicatos.
Reconoció que esta elección ha sido un proceso complicado, puesto que “se guardaron muchos odios que tenían desde las distintas fracciones de la burocracia del partido, y sabíamos que eso iba para allá, se parece bastante a lo que se veía en el PRD, es normal, es la cultura política de los compañeros, tanto Mariocomo Porfirio estuvieron en el PRD y mantienen ese ímpetu de política de cúpulas que están haciendo ahora, sino la costumbre de pelearse entre ellos”.
Finalmente, expresó que Muñoz Ledo y Delgado no piensan en construir partido. Por el contrario, Porfirio está enfocado en su candidatura para el 2024, y Mario en la continuidad de los compañeros que buscan reelegirse para 2021.