03 de marzo de 2022.- La cifra de desplazados por la guerra en Ucrania, que llegó a casi un millón de personas, aumenta; al igual que la toma de ciudades y los bombardeos con muertes de civiles en la capital Kiev y en la segunda ciudad más importante, Járkov, donde se destruyó parte de su catedral.
Esto sucede en el octavo día de combates, cuando se reanudan las negociaciones este jueves, según Mijail Podoliak, asesor del Presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, quien –por cierto- hace unas horas emitió un mensaje prometiendo que reconstruirá Ucrania, y Rusia pagará por ello.
Se menciona –según medios internacionales- que la ciudad de Mariúpol está cercada por los rusos, como sucedió ayer cuando tomó la primera ciudad con un control total: Jersón.
Los militares de Rusia están apostados en su alcaldía y ya dictaron reglas para los civiles, según reconoció el propio alcalde de Jersón, Igor Kolykhaev al The New York Times.
En la ciudad del sur de Ucrania, con 290 mil habitantes, ya se les pidió: toque de queda de 8 de la noche a 6 de la mañana, sólo pueden salir máximo dos personas sin provocar a los militares y se permitirá el ingreso a la ciudad únicamente de vehículos que transporten alimentos, medicinas y otros productos.
Rusia por su parte, este miércoles reconoció 500 bajas de soldados y mil 600 heridos desde que empezó la invasión.
Mientras tanto, el expresidente Donald Trump cambió su postura sobre la invasión a Ucrania. Esta vez no elogió al presidente de Rusia, Vladimir Putin, pero sí le pidió terminar con el ataque.
El exmandatario al definir la invasión rusa como “un holocausto”, dijo que esto se deben solucionar por la vía diplomática a través de acuerdos.
Nicolás Maduro, presidente de Venezuela por su parte, calificó como un “crimen” y “locura”, las sanciones impuestas a Rusia por parte de varios países.
El Banco Mundial, en tanto, anunció la suspensión de programas de ayuda tanto a Rusia como a Bielorrusia, mientras que anunció apoyos millonarios para Ucrania como medida de emergencia.